Las elecciones autonómicas en Cataluña no han despejado el panorama político tras el desafío soberanista. Una fuerza constitucionalista, Ciudadanos, ha ganado las elecciones con claridad en número de votos y escaños, pero las fuerzas independentistas suman los diputados suficientes para reeditar el tripartito que desencadenó la crisis actual.
Los secesionistas han perdido las elecciones y ninguno de ellos puede presumir de ser la fuerza más votada, pero si JuntsxCat, Esquerra y los antisistema de la CUP consiguen aunar sus fuerzas, todo volverá al punto de partida previo al inicio del desafío independentista.
Tras los comicios de este jueves, se han acentuado los dos bloques antagónicos, entre constitucionalistas e independentistas, que no obstante, se han visto superados por Ciudadanos.
Con el 99% del voto escrutado, C’s ha roto todas sus barreras y ha sumado 1.092.461 votos, equivalentes al 25,35% por ciento, lo que le proporciona 37 escaños, frente los 736.000 votos y 25 escaños de 2015.
Inés Arrimadas ha ganado con claridad. Ha recogido parte de la abstención y del electorado del PP, que es la fuerza menos votada y queda reducido a un papel irrelevante con cuatro escaños (pierde la mitad de sus votos y 8 diputados en el Parlament). Arrimadas ha sumado muchos apoyos en las grandes ciudades y pierde fuerza en el medio urbano que en las ciudades pequeñas y pueblos, lo que quizá haya beneficiado a los independentistas, que son más fuertes en esas zonas y en el cómputo global han necesitado menos votos para obtener los mismos escaños que en 2015.
JuntsxCat, el partido de Puigdemont, arrebata la hegemonía entre el mundo independentista a Esquerra. La antigua Convergencia ha obtenido 934.203 votos y 34 escaños (31 en 2015), mientras que Esquerra obtuvo 922.376 votos y 32 diputados (35 hace dos años).
Al final JuntsxCat y Esquerrra vuelven a sumar 62 escaños, como en 2015, por lo que la CUP, la otra fuerza independentista y socio del anterior tripartito, será de nuevo la clave para reeditar el gobierno que acabó declarando la independencia unilateral de Cataluña. La mayoría absoluta está en 68 escaños, por lo que los 4 de los antisistema serán decisivos para la formación de un nuevo tripartito separatista.
Los socialistas experimentan una leve mejoría al obtener 17 diputados frente a los 16 de hace dos años, y 75.000 votos más (con el escrutinio al 99%), pero no terminan de despegar.
Los grandes derrotados son precisamente la CUP, que pierde 6 escaños y el PP, que pasa de los 11 de 2015 a los 3 de estas elecciones.
En resumen, C’s gana con claridad para que, quizá, todo siga como antes.
