Hay veces, cada vez más, en las que la realidad supera a la ficción; uno de esos casos tuvo lugar en la ciudad de Salamanca en la madrugada del pasado 7 de marzo
Una persona avisó a la Policía alertando de que estaba sufriendo una agresión en la confluencia de las calles Pérez Oliva y calle Eras de la capital salmantina, por lo que varias patrullas se movilizaron hasta el lugar de los hechos, según indica la Resolución Oficial.
De hecho, la persona denunciante realizó varias llamadas telefónicas para que los agentes acudiesen hasta ese lugar, desplazándose para ello varias patrullas. La sorpresa de la Policía al llegar fue que en ningún momento se habían llevado a cabo esas agresiones denunciadas, en unos hechos que tuvieron lugar en la madrugada del pasado 7 de marzo, en concreto a las 04.38 horas.
Como consecuencia de estos hechos, las autoridades adoptaron la siguiente resolución: «declarar la existencia de una infracción de carácter muy grave contemplada en los artículos 22.3.e y 23.1.c de la Ordenanza Municipal sobre Protección de Convivencia Ciudadana, imputable al/a la interesado/a, en relación con la Resolución de Alcaldía de fecha 4 de junio de 2.020, imponiéndole como sanción una multa por importe de 600 euros«.