Villavieja ya no quiere la mina de uranio de Berkeley

Vista del Monte de Retortillo que se pretende recalificar para construir una mina de uranio.

El Ayuntamiento de Villavieja de Yeltes ha elevado las correspondientes alegaciones a la Confederación Hidrológica del Duero para la paralización del proyecto minero de Berkeley en los términos en los que se encuentra redactado en la actualidad para abrir una mina de uranio y un cementerio nuclear en Santidad-Retortillo.

 

Es la Junta de Castilla y León, a través de la Comisión Territorial de Medio Ambiente y Urbanismo, la que tiene las competencias oportunas para que se devuelva a la empresa un proyecto que no se ajusta al uso solicitado, y que ha sido modificado por la empresa promotora, ampliando su objeto inicial con instalaciones de almacenamiento definitivo de residuos radiactivos, «siendo esta actividad contraria a las normativas urbanísticas y ambientales vigentes, ocasionando un grave perjuicio a la seguridad de las personas y al entorno de las zonas afectadas», indica el PSOE.

Por todo ello, el PSOE de Salamanca apoya la posición del Ayuntamiento de Villavieja de Yeltes para que la Comisión Territorial de Medio Ambiente y Urbanismo se pronuncie desfavorablemente a la posible apertura de la mina de uranio de Retortillo-Santidad.

Los socialistas recuerdan que el primer proyecto presentado a los Ayuntamientos de Boada, Villavieja de Yeltes y Retortillo, recogía como única actividad la extracción del mineral, pero en la actualidad, el expediente se encuentra paralizado ya que las modificaciones introducidas por la empresa añaden a la actividad extractiva inicial otras de fabricación de uranio y almacenamiento definitivo de residuos radiactivos.

Modificación unilateral

La inclusión de esta actividad se ha hecho de manera «unilateral por parte de la empresa sin haber consultado, ni tenido en cuenta, la opinión de los municipios afectados, (sirva como ejemplo de ello las anomalías del periodo de exposición pública del proyecto)», indican los socialistas.

Además, la ampliación de la actividad de la mina requiere de nuevos permisos y licencias, incluyéndose aquí la dificultad de realizar este tipo de actividades en una zona catalogada e incluida dentro de la Red Natura de la Unión Europea y Zona Especial de Protección de Aves declarada por la Junta de Castilla y León, lo que ya de por sí, implica la imposibilidad de realizar otra actividad más que no sea la extractiva.

Junto a ello, el alcance del nuevo proyecto obliga a que se tomen las medidas oportunas para evitar que se produzcan vertidos de aguas residuales al cauce del río Yeltes y su posterior trasvase al río Duero.

1 comentario en «Villavieja ya no quiere la mina de uranio de Berkeley»

  1. Los de Retortillo tampoco la quieren, pero unos concejales agradecidos y con nómina, impiden que su alcalde pueda realizar la oposición al proyecto. Los últimos cuatro años de la anterior legislatura fueron negros para los intereses de los que tenemos intereses en Retortillo.

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