
La política y la calle
En España la política no es un fino combate de esgrima sino una pelea de kickboxing que se libra, con todos los golpes y artimañas propios de la disciplina, en un Congreso de los Diputados trasformado en un ring. Desde los escaños y tribunas se transmite la pelea por los medios de comunicación y tertulias televisivas, pasando por los juzgados, representando un espectáculo teatral donde la verdad y la mentira se retuercen hasta volverse indistinguibles. Un día cualquiera: ayer, hoy (…)