El Aula de Caja España-Duero acogió este jueves el acto en el que la investigadora Rosa María Lorenzo López pronunció el discurso de ingreso en el Centro de Estudios Salmantinos (CES), que en su pleno ordinario de diciembre del pasado año acordó su nombramiento como miembro numerario.
Le respondió, en nombre del CES, la profesora titular de Historia del Arte de la Universidad de Salamanca y también integrante del CES, Nieves Rupérez Alfajano, mientras que la presentación corrió a cargo del presidente de la institución cultural, Jesús Málaga Guerrero.
Rosa María Lorenzo López, Premio Nacional de Investigación Histórica y Etnográfica, concedido por el Ministerio de Economía y Competitividad en el año 2013, es funcionaria de carrera de la Diputación de Salamanca y ha dedicado más de veinte años a la investigación histórico-etnográfica y el patrimonio cultural en Salamanca, que ha divulgado en libros, artículos, conferencias, exposiciones; en prensa, radio y televisión. Ha elegido como tema de su disertación La producción de loza en la ciudad de Salamanca, entre los siglos XVI-XIX.
La producción de loza
En su discurso de ingreso en el CES, ‘La producción de loza en la ciudad de Salamanca, entre los siglos XVI-XIX’, Rosa María Lorenzo referió que desde la Edad Media y hasta las primeras décadas del siglo XX, la alfarería en la ciudad de Salamanca llegó a ocupar a gran parte de la población situada entre la puerta de Toro y la de Zamora, en el denominado Barrio de Olleros, posteriormente conocido como El Conejal. Allí se asentaban las viviendas, obradores y hornos del gremio de olleros, que desde principios del siglo XVI producían tres tipos de loza: blanca, amarilla y tosca.