Para celebrar el día Mundial de los Prematuros se han soltado globos en el Clínico
La celebración del Día Mundial de los Prematuros en el Hospital Clínico de Salamanca se ha iniciado con una charla sobre el desarrollo de prematuros, tras lo que se ha hecho una suelta de globos en honor a los pequeños. La doctora Pilar García ha sido la encargada de dar la charla, en la que ha hablado de cómo tratar a estos niños para que se desarrollen de forma correcta.
La conferencia, que no estuvo exenta de bebés correteando, riendo y jugando con los globos que posteriormente se iban a soltar, se centró en el estrés que sufren los recién nacidos en las unidades neonatales. Estos bebés sufren constantes manipulaciones que muchas veces conllevan actos dolorosos y no respetan sus horas de sueño, además de estar expuestos a grandes dosis de luz y ruidos. Por lo que, en muchas ocasiones, existe una ruptura en la relación madre e hijo, debido a la distancia.
En Salamanca se tratan al año aproximadamente 50 niños de menos de 32 semanas, ya que acuden niños de otras provincias. La doctora García explicó que hay que tratar de salvarles a partir de las 22 o 25 semanas, cuando se encuentran al límite de la viabilidad. Todos estos niños pueden crecer de forma normal o sufrir secuelas motoras, sensoriales, de conducta… Pueden tener muchos problemas.
Para favorecer su desarrollo, la doctora hablaba de mantener el contacto del niño con sus padres, suministrarles leche materna, mejorar las instalaciones de las unidades neonatales, la manipulación del niño con flexión, la utilización de nidos, evitar su inmovilización en superficies duras, evitar su posición en supino sin fronteras, la regulación de la luz y el ruido, tener cuidado con los actos de dolor, fomentar el método canguro e incitar a los padres a que se impliquen.
Se han logrado varios avances en neonatología a lo largo de los últimos años, como la mejora de la ventilación mecánica de los niños, la administración de sulfactante pulmonar o la maduración intra-útero con corticoides, pero lo que más alegra a la doctora es haber conseguido un mayor entendimiento de lo que les ocurre a estos pequeños, gracias a múltiples asociaciones y congresos realizados.