Rusos, mexicanos, estadounidenses, franceses, colombianos, portugueses, italianos, argentinos…
[dropcap]Q[/dropcap]ué la Nochevieja Universitaria había atravesado fronteras era un hecho, pero es que este año la cantidad de jóvenes de otros países que se han acercado hasta Salamanca ha sido evidente. Salamanca se convirtió, más que nunca (y eso que aquí estudian multitud de extranjeros) en una pequeña sede de la ONU.
¿De dónde sois?
Rusia. 13 horas de avión. Trasbordos y sólo por dos noches. Fiesta.
Así se expresaba un ruso que compartía bebida con franceses, italianos y estadounidenses. Todos con muchas ganas de disfrutar de una fiesta que se ha hecho internacional.
Pero, no sólo estaban ellos. Las pandillas de latinoamericanos han sido muy numerosas. Compartían rato de risas y diversión a raudales jóvenes argentinos con mexicanos, portorriqueños, colombianos y bolivianos.
Los brasileños iban por libre y también en grupos numerosos ondeando su cañariña. Hablando el mismo idioma, pero un poco más cerca de Salamanca, no tuvieron que coger avión para llegar, estaban los portugueses, más concretamente de Guarda, que brindaban por la Nochevieja Salmantina como si de la suya se tratase.
De Italia y desafiando el frío, iban en sandalias, un grupo de jóvenes interesadas por dónde estaba la Plaza Mayor y la gominolas.
Desde España, de todos los rincones. Valencianos acordándose del ‘caloret’, porque en Salamanca «hace un frío que pela». Abulenses, leoneses, vallisoletanos, granadinos, sevillanos, vascos…
Y así hasta los más de 40.000 jóvenes que adelantaron la Nochevieja, este año con un recuerdo y homenaje a las víctimas del atentado terrorista de París, por ellos sonó una campanada más, doce más una. Y que sigua la fiesta.
GALERÍA DE FOTOS, AQUÍ
