Salamanca es la provincia de Castilla y León donde más han avanzado las fuerzas emergentes en los últimos meses. C’s, sobre todo, y Podemos han desgastado seriamente a PP y PSOE, un deterioro que es especialmente notable para el PP, hasta el punto de configurar un mapa impensable no hace mucho tiempo.
Así se desprende de una encuesta de Sigma 2 para ‘El Mundo’, que constata la subida fulgurante de C’s, que se convierte en la segunda fuerza política de la provincia, muy cerca ya de un PP que ha perdido casi la mitad de sus apoyos en cuatro años, desgaste que se ha mantenido incluso desde las elecciones municipales del pasado mes de mayo.
El PP obtendría hoy el 34 por ciento de los votos, frente al 43% que obtuvo en mayo y el 60% de las generales de 2011.
C´s pasa a ser ya la segunda fuerza política de la provincia y crece a un ritmo inversamente proporcional al deterioro del PP. La formación que lidera Albert Rivera obtendría el próximo 20D el 27% de los votos en la provincia de Salamanca, según El Mundo, frente al 9,6 por ciento que obtuvo en las municipales de mayo. Un ascenso espectacular que se produce, fundamentalmente, a costa del PP, aunque también araña parte del electorado desafecto del PSOE.
Este resultado es el mejor de C’s en toda la región.
Crecimiento imparable
El crecimiento imparable de C’s le ha hecho quedarse a solo siete puntos del PP y rebasar con claridad al PSOE, que no encuentra su suelo, de momento. Los socialistas pasarían a ser la tercera fuerza política con el 18% de los votos, frente al 29% que sumaron en los comicios de mayo y el 26,3% de las generales de 2011.
Se queda muy cerca de Podemos, que también obtiene en Salamanca el segundo mejor resultado de Castilla y León con el 16% de los apoyos (en Burgos tendría el 18%).
Con estos resultados, el PP obtendría dos diputados (tenía tres), mientras que C’s y PSOE, uno cada uno.
La región
En Castilla y León, donde Juan Vicente Herrera gobierna gracias al sostén del partido naranja, la marca PP baja pero resiste mejor que en otras regiones. Allí el PP se alza con un 37% de los sufragios. Es cierto que hace cuatro años cosecharon el 55,7%. Ahora pierden 5 diputados en favor de Ciudadanos.
En Castilla y León quien más sufre electoralmente es, de nuevo, el PSOE. Ciudadanos les arrebata el segundo puesto, además, con cierta ventaja. El partido de Rivera logra el 23% de los votos, los socialistas el 18% y Podemos el 15%.
Ciudadanos da un salto tremendo en Castilla y León. En todas las provincias menos en Zamora adelanta al PSOE como segunda fuerza. De hecho sus resultados son verdaderamente buenos, según informa El Mundo.
El PP aguanta por encima del 35% pero Ciudadanos se coloca en porcentajes superiores al 25% en Ávila y Segovia; y del 26% en Palencia y del 27% en Salamanca. De los 8 escaños que obtendrían, 5 proceden del PP y el resto del PSOE, que puede perder entre uno u dos más a favor de Podemos. Los partidos emergentes, sobre todo Ciudadanos, consiguen entrar en una de las comunidades con un comportamiento electoral más uniforme, donde históricamente sólo se ha votado al PP o a PSOE.
1 comentario en «C’s desgasta al PP que sufre un descenso imparable en Salamanca»
Quizás el gran problema político en España es que ningún Partido ha propuesto reducir drásticamente el número de políticos y con ello sus asesores para que sean los funcionarios quienes se encarguen de la administración, dejando la gestión para los primeros.
España tiene menos maestros y profesores que la media de la UE, menos médicos, menos enfermeras, menos empleados de Banca por habitante…y así sucesivamente….pero tiene el doble de puestos políticos.
Es evidente que el gran recorte tiene que venir por la reducción ¿del 50% de la clase política pagando más -la política en España está mal pagada y por eso muchos tienen que ganar dinero de otros lados no siempre compatibles aunque sean legales- a los que queden…es decir…ejecutar la política del acordeón. Y cuando sean capaces de baja el nivel de paro al 5%…entonces…ya veremos.
¿Fácil?…en estos momentos imposible…todos los Partidos solo piensan en obtener votos para ir «colocándose» muchos en un buen puesto.