Las obras de renovación de la red de agua y de electricidad de la Plaza Mayor comenzaron este miércoles y se llevarán a cabo de forma simultánea durante dos meses, como mínimo, para minimizar las molestias a hosteleros, comerciantes y peatones.
Las obras se ejecutarán por tramos de forma que no se iniciará uno nuevo hasta que no se haya cubierto y pavimentado el anterior. Además, la zona de actuación permanecerá vallada en todo su entorno y en aquellos puntos en los que coincidan con el tránsito peatonal se habilitarán pasarelas a través de las zanjas.
En total, se sustituirán 124 metros de tubería de fibrocemento por fundición dúctil, material mucho más resistente y duradero (51 metros de red de distribución, y 73 de red de saneamiento) para mejorar el servicio y eliminar las filtraciones al subsuelo y locales, los malos olores y las obstrucciones.
Las redes de agua de la Plaza Mayor, tanto de distribución como de saneamiento, tienen una antigüedad superior a treinta años, siendo de materiales que actualmente no se utilizan y que presentan un degradado estado de conservación. En concreto, se renovará la red de distribución y saneamiento en el pabellón de San Martín (entre los números 20 y 30) y de Petrineros (entre los números 37 y 41).