Un grupo de bomberos de Castilla y León, dos de ellos de Salamanca, pertenecientes a la ONG G-Fire Specialist Group, están llevando a cabo acciones de salvamento y asistencia a los refugiados sirios en la isla de Lesbos. Su objetivo es guiar a las barcas que llegan hasta la playa para que los refugiados puedan descender de forma segura.
La ONG G-Fire nació en Palencia el pasado mes de noviembre y su labor se ha extendido por todo el territorio de Castilla y León, desde donde acuden bomberos voluntarios para hacer relevos cada quince días. Dos voluntarios de Salamanca, José Luis Carrera y Álvaro Vallejo, han formado parte de esta labor y han contado este viernes su experiencia en Lesbos asistiendo refugiados.
Desde el 1 de enero hasta el día 15 han estado realizando el trabajo en la ciudad de Mitilene, donde evitaban que las barcas chocaran con una zona escarpada guiándolas a la orilla de la playa más cercana y ayudando a los refugiados a bajar, quienes pueden llegar en condiciones de hipotermia, caerse o llevar niños consigo. Esta asistencia es vital, porque las barcas que les dan los traficantes, quienes les cobran 1.000€ por persona para escapar de la guerra, son de muy mala calidad y no aguantarían un golpe contra las rocas. Puede parecer un trabajo muy simple pero, si esta labor no se realizara, lo más probable es que estas personas fallecieran, según ha explicado José Luis Carrera.
Los accidentes
La zona que ellos cubren no es muy frecuentada por su dificultad, por lo que reciben entre 4 y 5 barcas al día. En otra zona de más fácil acceso reciben 20 barcas diarias y en el norte pueden llegar entre 40 y 50. Sin embargo siempre deben estar alerta, turnándose cada doce horas, porque pueden suceder accidentes. Según contaba Álvaro Vallejo, uno de los momentos más difíciles ocurrió un día en el que “tuvimos que nadar bastante tiempo porque había una barca a la deriva”. Según el bombero, no es miedo lo que sienten, sino “incertidumbre, porque no sabes lo que te vas a encontrar”.
Para realizar el trabajo completo, se comunican entre ellos vía WhatsApp y se coordinan con otras ONG como Acnur para que ellos les lleven en autobuses hasta el campamento, donde reciben asistencia sanitaria y alimento. Una vez pasado ese tiempo, suelen coger un ferry hasta Atenas, donde ya se sienten seguros habiendo entrado en Europa y desde donde les destinan a diferentes países.
Esta ONG se financia por voluntarios. En el caso de que alguien interesado quisiera colaborar, podría donar dinero al número de cuenta que aparece en su página web o puede donar materiales como trajes de neopreno. Para cualquier contacto también se puede hacer por vía de su página de Facebook.
Texto y foto: Paula Castro Morán
1 comentario en «Dos héroes salmantinos en Lesbos»
¡Estos sí que son héroes! ¡Y de los más grandes! ¿Por qué no se les hace un homenaje? ¿Tiene que morir alguien para ello? ¡Deberían ser recibidos en el Ayuntamiento, y con música, y salir al balcón a recibir el aplauso de todos los salmantinos en la Plaza Mayor!