El Salón de Recepciones del Ayuntamiento de Salamanca acogió este miércoles el discurso de ingreso del escultor Agustín Casillas en el Centro de Estudios Salmantinos (CES), que en su pleno ordinario de diciembre de 2014 acordó nombrarle miembro honorífico.
Le respondió, en nombre del CES, el miembro numerario y secretario del mismo Francisco Morales Izquierdo, mientras que la presentación corrió a cargo del presidente de la institución cultural, Jesús Málaga Guerrero. El alcalde de Salamanca, Alfonso Fernández Mañueco, presidió el acto.
En su intervención, Agustín Casillas se refirió de modo muy particular al proceso de creación de una cabeza de Miguel de Unamuno que ha realizado para la ocasión y que entregará al Centro de Estudios Salmantinos en señal de agradecimiento por el reconocimiento que se le dispensa.
Escultor salmantino por excelencia
Un reconocimiento que le llega dada la trayectoria de este prolífico artista, que ha sido definido como el “escultor salmantino por excelencia”, tanto por el sello de esta tierra con que ha marcado su obra como por la nutrida -hasta ahora no igualada- presencia de ésta en las calles y plazas de la ciudad que le vio nacer.
En el curso del acto se presentó el libro “Gente nuestra”, que incluido en la Serie Minor del CES -nutrida, asimismo, por otros discursos de ingreso- reúne en sus páginas las sensaciones de una cuarentena de autores sobre otras tantas piezas del escultor, todas ellas expuestas en lugares públicos -rincones diversos de nuestra ciudad- o edificios de público acceso.
Agustín Casillas Osado nació en Salamanca en 1921 y ya con diez años (de 1.931 a 1.935) asistía a clases de dibujo lineal en la Escuela de Nobles y Bellas Artes de San Eloy, ampliando posteriormente conocimientos sobre dibujo artístico y escultura (vaciado y modelado) en la Escuela de Artes y Oficios de Salamanca (1936-1946). Mediada la década de los cuarenta del pasado siglo crea su propio taller y abre su amplio catálogo de exposiciones, que le han llevado a difundir su obra fuera de Salamanca, llegando no solo a otros puntos de la geografía española, sino también diferentes ciudades del vecino Portugal y otros lugares del mundo, entre los que se encuentra la ciudad alemana de Würzburg, con la que Salamanca se hermanó en 1980. La Salina, en septiembre de 2009, acogió la hasta ahora última gran exposición individual: “Casillas: identidades salmantinas”, promovida por el Instituto de las Identidades, de la Diputación Provincial de Salamanca.
En su extensa trayectoria artística, aparte de galardones locales y provinciales, ha recibido premios de ámbito regional y distinciones nacionales. El Ayuntamiento de Salamanca le concedió, en 2015, la Medalla de Oro de la ciudad.
El truco de la vida
Asegura que el truco para mantenerse tan fresco a sus 95 años es levantarse cada mañana a las siete «y trabajar dos horas por la mañana y dos por la tarde en el taller o en casa».
El origen del busto de Unamuno hay que buscarlo en la década de los 70, cuando el escultor realizó uno para una semana unamuniana que tuvo lugar en la Universidad. La familia del escritor vasco le encargó varios, pero de tamaño más pequeño y con el molde de escayola hizo un moldeapiezas con el que ha hecho una serie única y exclusiva de cinco piezas. La quinta es la que le ha regalado al Centro de Estudios Salmantinos.