- La ley obliga a que sea obra de empresas o profesionales y no de «amigos»
- La Inspección de Trabajo hace la vista gorda en esto y se centrará en vigilar los bares
La Inspección de Trabajo y Seguridad Social ha informado al Ayuntamiento de Ciudad Rodrigo que, en base a una campaña centrada en el sector de hostelería, que durante el Carnaval realizará actuaciones con el fin de comprobar y controlar que estas empresas cursan alta en la Seguridad Social, de los trabajadores contratados, con independencia de la naturaleza y duración de la actividad, incluyéndose expresamente, los denominados “extras” para eventos concretos o fines de semana y festivos como serán estos días.
Incluyen los establecimientos de hostelería en sentido amplio (restaurantes, bares, discotecas, pubs, hoteles,… etc.), tanto los abiertos con carácter permanente, o habitual, como aquellos abiertos para esta ocasión y de forma temporal para las fiestas locales.
La Inspección en su comunicación al Ayuntamiento, define esta acción como de lucha contra el empleo no declarado, para la promoción del cumplimiento voluntario por las empresas de sus obligaciones en materia de Seguridad Social.
Por otro lado, la Inspección es conocedora de la problemática surgida en relación con la construcción de los “tablaos” del coso taurino que se construye en la Plaza Mayor para estos días. «Se le ha comunicado la existencia de empresas en la misma, mediante varios documentos que aportan testimonios en este sentido, lo que hace que dichos trabajadores deban contar con derechos como su cotización en la Seguridad Social, salarios y condiciones de seguridad; sin embargo, la Inspección excusa su intervención en los argumentos que el Ayuntamiento le facilita, que le asegura que los trabajos se realizaban por las peñas, bajo colaboraciones de “amistad, benevolencia y buena vecindad”, explican fuentes consultadas por La Crónica.
Sin embargo, insisten dichas fuentes que la cuestión se agrava, teniendo en cuenta que no existe legislación que determine quiénes pueden servir copas en una barra, pero sí, quiéenes pueden intervenir en una obra de construcción. La Ley que regula la subcontratación en el sector de la construcción, establece que sólo pueden participar en las obras empresas debidamente registradas y con personal formado. «Teniendo en cuenta que la construcción de la plaza de toros es una obra de construcción, en base a lo establecido en la Guía Técnica que el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo ha redactado al efecto, y habiendo sido esto reconocido por la Inspección de Trabajo, puede ser objeto de requerimiento su construcción únicamente, por profesionales».
¿Por qué no controla el cumplimiento legal de la construcción, aunque se le han pedido, y sin embargo, sí el de la actividad hostelera?
A los hosteleros siempre les quedará la opción de alegar “amistad, benevolencia y buena vecindad” con sus ayudantes, y por supuesto, darles el salario, en “B”. ¿Les servirá este argumento?