Ganemos propuso este miércoles que los cargos institucionales, como el alcalde y los concejales, no participen en actos religiosos, como la Semana Santa, en virtud de su cargo, y que si quieren ir sea a título particular, como cualquier ciudadano.
Aseguran sus concejales Pilar Moreno y Gabriel de la Mora que no se pueden amparar en la vertiente cultural y turística de una celebración como la Semana Santa, para hacer profesión de sus creencias y mezclar en ellas al Ayuntamiento, «porque el alcalde representa a toda la ciudad y no puede decantarse por una confesión«, precisó De la Mora.
Además, apoyar a una confesión significaría «discriminar» a las demás, por mucho que la católica sea predominante en Salamanca.
Ganemos asegura que buena prueba de que se aprovechan aspectos culturales y turísticos para apoyar a la religión católica es la Semana Santa, y los acuerdos que adopta el Ayuntamiento. Uno de ellos, permitir que cuelguen del balcón del Consistorio los pendones de cada cofradía, que son entidades religiosas y particulares, como así lo acreditan ellas mismas, «cuando a Ganemos se nos obligó a retirar una pancarta contra la violencia de género». Otro, el convenio de apoyo a la Semana Santa, donde se mezclan aspectos de mantenimiento del patrimonio (cultura y turismo) con los meramente religiosos, como el sostenimiento de las cofradías.
Al igual que piden separar la vertiente religiosa de los aspectos culturales y el turísticos en la Semana Santa, sobre todo a la hora de que haya un apoyo institucional, Ganemos también considera que se deberían «secularizar» las fiestas «incluidas las patronales», que no tienen por qué estar vinculadas a santos y vírgenes.