Decenas de personas y autoridades locales participaron este martes en la concentración de repulsa hacia los atentados yihadistas perpetrados en Bruselas.
Todos guardaron un respetuoso silencio durante cinco minutos al término de los cuales la fachada del Ayuntamiento se iluminó con los colores de la bandera de Bélgica.
Entre los asistentes también había algunos turistas de visita en la ciudad aprovechando las vacaciones.