El fracaso no existe

 

[dropcap]H[/dropcap]oy os traigo un cuento muy especial para mí, de esos cuentos que no entiendes salvo cuando uno ha probado o ha hecho algo que te saca de los esquemas. Lee…

 

Estaba en la playa una niña con su padre y él le pidió que probara si la temperatura del agua era buena. Ella tenía cinco años y se entusiasmó al ver que podía ayudar; fue hasta la orilla del mar y se mojó los pies.
-Metí los pies. Está fría- le dijo.
El padre la tomó en brazos, fue con ella hasta la orilla del mar y sin ningún aviso la tiró dentro del agua.
Ella se asustó pero después se divirtió con la broma.
-¿Cómo está el agua?- preguntó el padre.
-Está buena- respondió.
-Entonces, de aquí en adelante, cuando quieras saber alguna cosa, zambúllete en ella.

Paulo Coelho, (libro Brida)

A veces prejuzgamos o calificamos una situación sin haber experimentado la misma. Pero lo que debemos de saber es que a veces hay que zambullirse de cabeza ante ciertas situaciones. En ocasiones nuestros miedos, nuestras dudas y nuestras creencias nos juegan malas pasadas y ello trae el que muchas veces hablemos de situaciones sin haberlas experimentado antes.

Estas situaciones pueden ser para bien o para mal, pero lo cierto es que no hay nada mejor que arriesgar. Cuando arriesgas aprendes a asumir riesgos e incrementar habilidades, es decir, llenamos nuestra mochila de herramientas que sin duda alguna serán las que el día de mañana nos llevará al éxito.

No lo dudes, arriesga y no tengas miedo, zambúllete, prueba todo lo que siempre has deseado, embarcarte en ese proyecto, comienza o termina una relación, vive en otro país, cambia de trabajo y sea lo que sea que hayas decidido, disfruta de la etapa, de cada experiencia, de cada sensación, de cada emoción, de cada piedra, de cada lagrima o de cada sonrisa.

El fracaso no existe, solo existen aprendizajes y la oportunidad de seguir creciendo.
¿Y tú, en qué te zambullirías?

Jazz Sosa
Coach.

Si quieres seguir leyendo sobre coaching, inteligencia emocional, Liderazgo puedes visitarnos en la Universidad de la Felicidad.

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