El consejero de Educación de la Junta de Castilla y León, Fernando Rey, ha acudido a la Facultad de Derecho de la Universidad de Salamanca para clausurar los estudios de Máster-Doctorado en Estudios Interdisciplinares de Género y Políticas de Igualdad. Para él, la igualdad es algo prioritario para educar a los jóvenes en todo el proceso educativo.
Para el consejero es “una tarea muy meritoria en el campo de los estudios de la igualdad entre hombres y mujeres, que es un asunto sobre el que he trabajado como profesor”. Ha manifestado que le parecía muy oportuno acudir a Salamanca para reforzar un mensaje de igual de género en las aulas “que es algo sobre lo que no podemos bajar la guardia, porque diversos estudios nos están alarmando sobre un cierto repunte en las conductas de acoso entre iguales por razón de género en el ámbito escolar”.
Fernando Rey ha afirmado que las políticas educativas de la Junta están “bastante desarrolladas en todos los ámbitos” y que la igualdad se ha convertido en un objetivo social en el que se pretende luchar contra lo que él denomina “machismo invisible, neomachismo o machismo de baja intensidad”, que son aquellas conductas que parecen normales pero que no se deberían permitir.
Convivencia escolar
En el mismo día han presentado en Valladolid el informe de convivencia escolar. El objetivo es hacer de las distintas actividades e iniciativas algo sistemático y entren dentro del proceso formativo. Por suerte, las cifras de violencia en Castilla y León no son muy altas. Sin embargo, el tema del bullying preocupa mucho al consejero. “La clave es educar en el respeto”, ha afirmado.
En cuanto a otros temas de actualidad, Rey ha comentado el tema de las recientes manifestaciones contra la Lomce “una ley extremadamente controvertida”, ha admitido, y ha añadido que a él no le convencen algunos de los aspectos como el acceso a la universidad, los tránsitos desde la FP o los exámenes de 6º de primaria. Lo razonable para Fernando Rey es llegar a un gran acuerdo y que se haga una sola ley que nos dé estabilidad.
Por otro lado, respondiendo a la petición de un calendario con menos fiestas religiosas, ha manifestado que “agradezco el esfuerzo de la UGT por ofrecernos una alternativa”, pero cree que el calendario del próximo curso es “bastante razonable”. “Hacer un calendario que no parta de las fiestas religiosas plantea problemas porque tenemos un calendario escolar ahormado sobre tradiciones religiosas, pero estas tradiciones ya no son tanto religiosas, sino que se han convertido en tradiciones culturales”, ha dicho.
Texto y foto: Paula Castro Morán
