El jardín de la enfermería del convento de los Dominicos acogió el espectáculo de poesía, luz y música para celebrar el aniversario de la designación de Salamanca como Ciudad Europea de la Cultura
Llevan en Salamanca 800 años dándole esplendor, categoría y renombre. Por ello, qué mejor lugar para recordar que Salamanca fue Ciudad Europea de la Cultura que el Convento de San Esteban, en concreto el jardín de la enfermería, y qué mejor año que éste, al cumplirse los VIII siglos de la fundación de la Orden de Predicadores.
Este XVIII aniversario de la designación ha contado para su conmemoración con doce poetas salmantinos: Isabel Bernardo, Toño Blázquez, Javier Burguillo, Asunción Escribano, J. M. Ferreira Cunquero, Luis Frayle Delgado, Quintín García, José Amador Martín Sánchez, Alfredo Pérez Alencart, Antonio Praena, Emilio Rodríguez y Charo Ruano. Todos ellos han puesto voz a versos que recuerdan a otros tiempos o llevan a las decenas de personas que acudieron al encuentro a tiempos venideros, pero teniendo como inspiración a los Dominicos.
La luz acompañó a los poetas en su recorrido y la música hizo que la conjugación entre las bellas artes fuera perfecta.
