La Reina Sofía inauguró el IV Simposio Internacional ‘Avances en la Investigación Socio-Sanitaria en la Enfermedad del Alzheimer’. Este encuentro tiene como objetivo este año la necesidad de convertir los centros residenciales en auténticos hogares, siendo el CRE de Salamanca un centro puntero que está al día de los últimos descubrimientos y de técnicas más innovadoras
Doña Sofía ha inaugurado este jueves el IV Simposio Internacional ‘Avances en la Investigación Socio-Sanitaria en la Enfermedad del Alzheimer’, un espacio de encuentro a nivel internacional con el objetivo de reducir la prevalancia, la incidencia y los efectos del Alzheimer, así como mejorar los tratamientos, las perspectivas y la calidad de vida de los enfermos y sus familias.
España tiene, después de Japón, la esperanza de vida más alta del mundo. La media de edad de los hombres es de 80 años y de las mujeres de 85, por lo que las políticas de bienestar social están muy orientadas a enfermedades degenerativas, en las que el Alzheimer tiene una especial relevancia, ya que según explicó Susana Camarero, secretaria de Estado de Igualdad y Servicios Sociales, es la 7ª causa de muerte en nuestro país. Además, un millón y medio de personas padecen Alzheimer en España, de las cuales más de 80.000 viven en Castilla y León.
El Alzheimer es un problema muy grave que daña profundamente, física y psicológicamente, a muchas personas y familias en nuestro país. Porque el número de enfermos de Alzheimer en España se duplicará en el año 2040 llegando a ser casi dos millones y medio de personas que sufrirán esta demencia.
Por ello, las enfermedades neurodegenerativas se han convertido en una verdadera prioridad socio-sanitaria, no sólo para las instituciones públicas, sino para la comunicad científica y las organizaciones sociales.
El pasado mes de abril ya se aprobó la Primera Estrategia de Enfermedades neurodegenerativas del Sistema Nacional de Salud que se centra en tres aspectos vitales: prevenir la enfermedad y mejorar su diagnóstico precoz; ofrecer atención personalizada a los pacientes y establecer programas de respiro que faciliten el descanso y proporcionen apoyo emocional a quieres cuidad de estas personas afectadas.
Por este motivo, la calidad de vida de los afectados por algún tipo de demencia pasa irremediablemente por el entorno y todos los participantes y entidades colaboradoras de este simposio, en el que hay investigadores de Argentina, Suecia, Portugal y España, se trabaja desde hace años para lograr mejorar la calidad de vida de un porcentaje de la población que, cuando hablamos de mayores de 70 años, alcanza a un 30% de personas, según datos de la Conferencia Española de Asociaciones de Familiares de Enfermos de Alzhéimer.