En los sorteos de la tómbola Cachichi hay más expectación y entusiasmo que en el que se celebró este martes en el centro municipal Julián Sánchez El Charro, donde los agraciados disfrutarán de pisos a estrenar en alquiler con mensualidades de entre 250 y 340 euros al mes, con garaje y trastero incluido. Una bicoca, se mire por donde se mire.
Solo había suspiros y alguna expresión de nerviosismo entre quienes se quedaban a lado del número que salía agraciado, como en la Primitiva, pero que te deja como estabas. Compuesto y sin casa. A los que les tocaba no decían ni papa.
No estaban en la sala todos los que entraron en el sorteo (320 para 27 pisos, una promoción de 15 pisos entre las calles Venezuela y Rías Bajas y otra de 12 en la calle Salvador –Alto del Rollo– que acabarán «en verano»), pero sí bastantes de los que se llevaron una adjudicación al instante, pero actuaban como si les hubiera caído al de al lado. La alegría iba por dentro. Muy adentro.
Los vecinos, discretos van a ser un rato largo. Sin en estas circunstancias no arman bulla, a ver cómo justifican hacerla cuando hagan la mudanza a su nueva residencia.
La suerte está echada, y la de futuros aspirantes también, porque se ha formado una bolsa de candidatos a adjudicarse un piso si queda alguno de estos (o de otras promociones) vacantes.