Asaja ha denunciado el mal funcionamiento que hay en algunas unidades veterinarias y secciones de la Junta de Castilla y León en Salamanca por la falta de personal, lo que se traduce en un peor servicio a los agricultores y ganaderos de la provincia.
La situación no es nueva y los profesionales del campo llevan varios meses sufriendo los problemas que conlleva la falta de personal en determinadas áreas. «Un problema que, además, se ha acrecentado de manera muy importante en las últimas semanas por las vacaciones de los funcionarios, al no haber personal de sustitución para esos puestos», indica la organización agraria.
Unidades como la de Vitigudino o Lumbrales son ejemplos de este problema, «donde más del 50% de los puestos de trabajo están sin personal, o son ocupados por trabajadores que se han trasladado desde otra unidad veterinaria, dejando su puesto habitual sin cubrir».
Burocracia
Tan sólo el sobreesfuerzo que realizan algunos funcionarios, «asumiendo tareas que no son de su competencia directa, permite dar respuesta a los problemas que tienen los agricultores y ganaderos, quienes ya sufren a lo largo de todo el año un exceso de burocracia y encima, ahora, no hay funcionarios para darle solución a esos problemas«.
Desde Asaja Salamanca se exige a la Junta de Castilla y León que dote de personal todas las plazas de trabajo de las que dispone, «para que los agricultores y ganaderos no sean los sufridores de una situación de la que no son responsables».