Rotary Club Salamanca está de enhorabuena porque suma a sus socios un miembro más, Javier Parra, un profesional del marketing e inteligencia digital, así como profesor de la Universidad
Sumar un nuevo miembro a Rotary Club de Salamanca, no significa sólo incrementa el número de socios, es mucho más, es un valor añadido, porque inherente a esa persona vienen sus ideas, sus proyectos, sus metas y sus ilusiones, que son, sin duda alguna el motor que hace que todo club crezca.
Javier Parra es desde este jueves, día 6, nuevo miembro de Rotary Club de Salamanca. Su padrino, Roald Schoenmakers, director ejecutivo de Súmate Marketing Oline, lo presentó hace unos meses y los miembros del club vieron con magníficos ojos, gracias a su valía profesional, que sería un impulso muy importante al club. El presidente, Benito Blanco, le impuso la rueda rotaria y desde ya forma parte de este club que acaba de cumplir un cuarto de siglo.
Invitados a la reunión rotaria
La reunión rotaria tuvo otros protagonistas, uno de ellos, José Vicente Martín Galeano, futurible rotario. Martín Galeano es el presidente de la Confederación Empresarios de Salamanca, de la Asociación de Empresarios del Polígono Industrial y dueño de la empresa Provisa Segurida. Martín Galeano explicó que la nueva estructura empresarial «busca la estabilidad en el empresariado de Salamanca. Queremos poner un punto y aparte para hablar de lo que se necesita aquí. Es decir, atraer la inversión y con ello el empleo».
Martín Galeano subrayó que van a firmar un convenio con la Universidad para potenciar el VIII Centenario. «Queremos apostar por la pequeña y media empresa, pero también por el emprendedor joven y aquí tenemos una fábrica de talentos que es la Universidad. Hemos creado un grupo que se encargará de traer a los jóvenes que tuvieron que emigrar, para que deje de haber fuga de talentos».
Con relación al Polígono de los Villares, de cuya asociación de empresarios es presidente, señaló que van a cederle de manera gratuita locales a cinco emprendedores durante seis meses, «para que puedan arrancar. El único requisito que les ponemos es que cuando funden la empresa, lo hagan en el polígono».
Asimismo, asistieron a la reunión dos jóvenes rotaract, María, estudiante de violín en el Conservatorio Superior de Música, y Sofía, estudiante de filología hispánica. María procede, de Valladolid y Sofía, de Bélgica. Ambas se han comprometido a organizar en Salamanca un encuentro de jóvenes rotaract.
Y por último, los miembros de Rotary Club de Salamanca tuvieron el placer de conocer a John Elrington, rotario australiano, de Melbourne, que explicó que su club se encarga, entre otros proyectos, de instalar sanitarios en las escuelas de Etiopía, para que las niñas no tengan que ausentarse del colegio los días que tienen la menstruación, ya que los maestros notaban que las estudiantes no acudían a clases esos días, con la consiguiente pérdida de conocimientos.
La reunión concluyó con una cena de fraternidad donde se compartieron conocimientos, experiencias y proyectos.