El Comedor de los Pobres está realizando una cuestación durante todo este viernes para recaudar dinero para comprar alimentos y poder dar de comer a las 120 personas que acuden allí a diario. Los alimentos que más necesitan en este momento son leche, cacao, aceite, conservas y legumbres.
El Comedor de los Pobres de Salamanca se encuentra en una situación muy precaria. Se financia gracias a las aportaciones de personas que colaboran voluntariamente y con ese dinero compran los alimentos necesarios para atender a las personas necesitadas. Según los voluntarios, Salamanca es una ciudad muy solidaria, pero aún así tienen escasez de productos para realizar sus servicios.
Actualmente acuden a diario a comer en torno a 120 personas, a lo que se suman los aproximadamente 18 bocadillos que preparan cada día. El número de asistentes ha aumentado notablemente, pues antes solían acudir entre 80 y 90 personas. También el perfil ha cambiado en los últimos años. Actualmente acuden toda clase de familias y personas, ya sean españoles o extranjeros.
“Esto se debe a que, como hay muchísimo paro y muchísima crisis, la gente no tiene posibles y el comedor trata, en lo mayor de lo posible, de paliar a la gente necesitada”, explica la voluntaria Manoli Bueno.
Los alimentos que más les urgen adquirir son leche, cacao, aceite, conservas y legumbres, aunque también están escasos en número de voluntarios. “Todas las manos y todas las cosas que lleguen son muy bien recibidas”, cuenta Manoli Bueno.