El próximo martes día 18 de octubre el Ayuntamiento de Retortillo debatirá la propuesta para declarar personas “non gratas” a Jesús Cruz y José Ramón Barrueco, y por extensión a la Plataforma Stop Uranio.
«No sabemos a quién se le habrá ocurrido semejante acción», indican desde la plataforma, pero si finalmente se aprueba Stop Uranio responsabilizará de ello al Partido Popular (2 concejales, investigados por la justicia por trabajar para la empresa minera Berkeley) y el Partido Socialista Obrero Español (3 concejales, responsables de la dimisión del anterior alcalde por su oposición a la mina).
«En la España de los Bárcenas, Granados y compañía, una corporación municipal se atreve a realizar una declaración en contra de personas que están luchando para que no se abra en su comarca la única mina de uranio a cielo abierto de toda Europa occidental», indica la plataforma.
«¿Cómo es posible que el activismo medioambiental consiga el repudio de un ayuntamiento democrático? Hasta este punto han llegado los partidos de la corrupción en España», prosigue antes de preguntarse «por qué no declaran persona “non grata” al Papa Francisco: “Es loable la tarea de organismos internacionales y de organizaciones de la sociedad civil que sensibilizan a la población y cooperan críticamente, utilizando legítimos mecanismos de presión, para que cada gobierno cumpla con su propio e indelegable deber de preservar el ambiente y los recursos naturales de su país, sin venderse a intereses espurios locales o internacionales” (Laudato si)».
Stop Uranio señala que «no se dan cuenta de que en su municipio se va a destruir un espacio natural declarado en parte Zona de Especial Conservación en aplicación de la Red Natura 2000. No han heredado de sus padres unas dehesas de encinas atravesadas por el río Yeltes que envidiaría a la mayor parte del género humano tan preocupado por el cambio climático».
Recuerda que «deberían tener en cuenta que en su municipio se van a quedar por miles de años, y no es un eufemismo, residuos radiactivos procedentes de una planta de concentrados de uranio si no lo remedia la Audiencia Nacional».
Añade que «con esta actitud el ayuntamiento de Retortillo se une a la campaña iniciada por Berkeley Minera España S.L. contra estos dos activistas, obligados a realizar un acto de conciliación en junio previo a la interposición de una querella por su oposición a la mina».
Stop Uranio concluye diciendo que «en un proyecto bendecido por personas de dudosa catadura moral como Arias Cañete o José Manuel Soria, unos ediles de un pequeño pueblo de Salamanca persiguen a dos personas que lo único que pretenden es poder disfrutar de la naturaleza tal y como lo hicieron sus antepasados».
