El factor campo, la marea azul y el Würzburg fueron decisivo para la victoria de las salmantinas frente al vigente campeón de Europa.
Otra fecha que apuntar en nuestro «libro de epopeyas», 26 de octubre de 2016, el día que Avenida, arropado por toda una ciudad volcada, tumbó al equipo más poderoso, al campeón de Europa UMMC Ekaterimburgo 83-72.
El resumen: Las charras hicieron partido perfecto, intensas en defensa hasta extenuar y desesperar a las estrellas rusas, certeras en ataque con una sublime Milovanovic, secundad por Elonu o Silvia Domínguez (hoy se arrepentirá algún ruso de verla enfrente). Una noche memorable, con un pabellón entregado a la causa, un ambiente mágico. La sonrisa tardará en borrarse de nuestro rostro.
Serias, concentradas, espoleadas por una afición que casi llenaba el feudo azulón. Las charras sabían a lo que salían, cada una a la suya. Givens a ser la pesadilla de Torrens, Gil a tratar de desesperar a Griner, Silvia a ser el mayor cerebro en varios miles de kilómetros a la redonda, Milo calentaba la mano, Elonu se iba metiendo. A mandar desde el principio, desde el 2-2 las rusas no volvieron a oler de cerca la sangre. Cada ataque visitante era un suplicio y pronto las charras ponían tierra de por medio bordando el baloncesto, 23-15 tras diez minutos.
En un visto y no visto un 2-8 de parcial las dejaba tan cerca que Würzburg aguantó la respiración. Pero era para coger resuello porque llegó el éxtasis. Milovanovic se hizo con los mandos, la defensa subió (y parecía imposible) la intensidad hasta ahogar el ataque rutilante de Eka. Parcial de 14-0 que llevaba la máxima ventaja al marcador. Ver para creer, no sólo se tumbaba al gigante, se la vapuleaba. Al descanso, 43-29 y Würzburg despedía a sus guerreras de pie, como a los mejores toreros.
Era peligroso el inicio de tercer parcial, estaba claro que Ekaterimburgo iba a dar «guerra». Todo lo que habían fallado en la primera parte, a excepción de una Griner que aparecía como último recurso, entraba. Alba se enchufaba, de tres en tres, Meesseman igualmente. La lesión de Gil, que después volvería, dejaba a Avenida un poco despistado para permitir a las rusas rondar los diez puntos de desventaja, pero cada acción visitante se encargaba de responderla Milovanovic y una Elonu que, como siempre, silenciosa se plantaba una y otra vez bajo el aro, poderosa. 63-52 y diez minutos para soñar.
[quote_box_left]Ficha técnica.
Perfumerías Avenida, 83
UMMC Ekaterimburg, 72
Avenida: Domínguez (15), Givens (5), Elonu (18), Milovanovic (26) y Gil (4). Jugaron también: Marginean (6), Wheeler (5) y Krivacevic (4)
Ekaterimburgo: Baric (10), Nolan (6), Torrens (16), Meesseman (18), Griner (12). Jugaron también: Arteshina (5), Vieru (3), Cherepanova (0), Petrakova (2)
Partido disputado en Würzburg ante 2.900 espectadores[/quote_box_left]