Las enfermeras denunciaron este jueves que, un año más, las vacunas antigripales que se han suministrado a los centros de salud de Castilla y León dentro de la campaña que va a iniciarse en unos días «incumplen la normativa europea y española relativa a la bioseguridad que debe existir para evitar riesgos laborales para los profesionales de enfermería que administran estas vacunas».
La Mesa de la Profesión (formada por el Sindicato de Enfermería, SATSE, de Castilla y León y la Organización Colegial de Enfermería) critica que año tras año tenga que denunciar esta circunstancia porque los tipos de vacunas distribuidas por Sacyl no cumplan la legislación vigente en materia de prevención de riesgos laborales, concretamente con la de bioseguridad.
Además, en algunos tipos de vacuna la jeringa precargada no viene con la aguja insertada fija y el enfermero tiene que insertarla, «lo que supone un riesgo en cuanto a su manipulación y, por tanto, un incumplimiento de la normativa», indica este colectivo.
Añade que el Ministerio de Sanidad, que realiza la compra centralizada, y Sacyl, que no exige el cambio al Ministerio, incumplen la norma por la que se establecen disposiciones para la prevención de lesiones causadas por instrumentos cortantes y punzantes en el sector sanitario y hospitalario.
Según la Mesa de la Profesión Enfermera de Castilla y León, la Administración sanitaria está obligada a cumplir dichas normativas y a garantizar la seguridad laboral de sus trabajadores. Además, esta asociación recuerda que siempre ha defendido la capacitación profesional de las enfermeras que en muchos casos, además del grado y máster, están en posesión del doctorado, «lo que les hace estar en el más alto nivel del Marco Español de Cualificaciones para la Educación Superior (MECES)».
Por el contrario, el Servicio de Salud de Castilla y León, con el consejero Antonio Sáez a la cabeza, «no hace más que impedir el progreso de una profesión y no se acuerda de la profesión enfermera hasta que ésta le puede suponer un problema grave, como podría ser la campaña de vacunación de la gripe y el decreto vulgarmente llamado de ‘Prescripción Enfermera'».
