Rotary Club de Salamanca ha puesto en marcha un foro donde profesionales de distintas áreas exponen su visión del emprendimiento para ayudar a futuros emprendedores a afrontar los retos con los que se encontrarán a la hora de poner en marcha su negocio
Bajo el título ‘Salamanca Emprende’, el foro rotario contó con la presencia de Ignacio Manzano, presidente del Colegio de Agentes de Comercio, César Redondo, gerente de Feyce e Isabel María García, vicedecana de Docencia y profesora de Economía Financiera, cada uno de ellos expuso su punto de vista con relación a la visión que tienen sus negocios y la Universidad de Salamanca con relación al emprendimiento.
Ignacio Manzano comenzó su intervención asegurando que su profesión, de agentes de comercio, «no conoce el paro. Nosotros somos la intermediarios entre el productor y el consumidor. Además, el 60% de las ofertas de empleo están destinadas a agentes comerciales».
Eso sí, enfatizó una cuestión: «Es importante conocer el producto y estar formado, porque los agentes ven venir las crisis del producto y además, conocen a los consumidores, por lo que es esencial que la empresa confíe en sus agentes».
Señaló que en España están muy poco valorados. «El que no vale para otra cosa, se mete a vendedor, ocurre parecido con los camareros. Pero, no es cierto, mi mayor preocupación es que los agentes estén formados y para ello es esencial que la empresa los forme. No es suficiente con que les dé un folleto o un listado de productos. Los tiene que implicar. Desde el colegio también ofrecemos cursos, porque un agente comercial, si quiere, no tiene techo, puede crecer y crecer y sobre todo, puede ser su propio jefe, con lo que implica».
César Redondo, gerente de Feyce, conoce muy bien su producto, la miel. En la actualidad, Feyce comercializa miel en cuatro continentes, le falta Oceanía, «pero todo se andará». Redondo explicó cómo ha ido creciendo su empresa, desde sus bisabuelos, que comenzaron casi por casualidad en Valero, hasta ahora que es una de las más importantes del mundo en importación y exportación de miel.
No obstante, «todo no han sido éxitos. También hemos tenido fracasos, pero hemos aprendido a superarlos y a ver una oportunidad en ellos», matizó Redondo. Uno de estos retos que se puso hace unos años fue salir a vender a otros países. «Hemos visto el mundo como un sólo mercado». El primer viaje fue a Alemania y de un primer camión de miel pasaron a una docena y así hasta el vuelo a China. «Es un país muy interesante, porque no existe la cultura del pelotazo».
El secreto de su éxito: «El producto tiene que tener las tres ‘bes’: Bueno, Bonito y Bartato. Nadie regala nada. Todo se consigue con esfuerzo y sacrificio. Además, hay que tener en cuenta que la apuesta de un negocio tiene que ser a largo plazo».
Por último, Isabel María García, vicedecana de Docencia y profesora de Economía Financiera de la Universidad de Salamanca explicó que los alumnos en la facultad «salen muy bien formados». Aunque puntualizó que no hay cultura de emprendimiento en nuestro país, «aunque poco a poco, esto también va cambiando. La Universidad genera conocimientos y los transferimos a la sociedad. Nosotros nos dedicamos, además de a impartir las clases, a la investigación y a ayudar a detectar posibles dificultades que pueden atravesar las empresas».
García dio un consejo: «La contabilidad sí o sí la tienes que llevar a cabo y hay que pagar impuestos, porque van a generar un bien común».
El foro rotario trata de relacionar a emprendedores con empresarios y personal docente, así el abanico es plural. Además, las intervenciones y los coloquios que se establecen siempre son productivos.