El CD Guijuelo consiguió este domingo un empate que le sabe y le sirve para poco en su desplazamiento a Estella, para enfrentarse al Izarra (2-2).
Era el primer partido de Fabregat en el banquillo chacinero y los jugadores querían dar buena imagen para ganarse su confianza.
Sin embargo, las cosas se torcieron muy pronto, en el minuto ocho, cuando Isaac aprovechó el resbalón de un defensor chacinero para marcar el 1-0.
Los guijuelenses se sobrepusieron a este contratiempo y Pino consiguió igualar el partido en el minuto 22.
Así se llegó al descanso y tras la reanudación, eran los de Fabregat los que se hicieron con el balón, pero esa posesión no se traducía en nada positivo.
Los navarros esperaban atrás para enganchar una contra y tratar de cerrar el encuentro, pero la insistencia del Guijuelo obtuvo su premio en el 83 con el segundo de Pino en su cuenta particular.
Un doblete que hizo soñar con la remontada y con los tres puntos, vitales, pero en el 88 Isaac marcó, igualmente, su segundo de la tarde y acabó con los sueños chacineros.
El Guijuelo sigue anclado en la parte peligrosa de la clasificación, pero este domingo puso en un aprieto a un rival de la zona tranquila. La próxima semana recibe en El municipal al Mutilvera, un equipo de la zona roja que este sábado le amargó la fiesta al Caudal Deportivo.