[dropcap]P[/dropcap]odemos parafrasear a Sabina con la canción del Pirata y es que el artista Ángel Cortés ha sido francotirador, guardes en una finca y pintor en Nueva York. Y entre todas sus vidas escoge la del artista que sólo necesita un lápiz y un papel en blanco y las figuras más sorprendentes y expresivas cobran vida delante del espectador. Es un pintor hiperrealista que en febrero estará en Salamanca impartiendo un curso sobre su técnica.
Busco su nombre en Google y la 1ª entrada dice: ‘De francotirador en Bosnia a pintor en Nueva York’. ¿Díganos que sólo es un titular sensacionalista?
(Risas) Bueno, un poco sensacionalista es, desde luego. Esa palabra no me gusta. A la gente le da un poco de morbo. Y sí, mi primera exposición fue en Nueva York.
¿Explíquenoslo un poco?
Fui militar durante 8 años y una de las misiones fue en Bosnia. Fui como tirador de élite del Ejército español. Una vez allí, competí con los tiradores del resto de ejércitos sacando la mejor puntuación. Pero preferiría centrarme en mi etapa artística…aquello fue duro.
También leo que se arruinó y que en un intento desesperado fue a parar a una finca. Ahora díganos qué significado tiene para usted esta frase: Los caminos del Señor son inescrutables. Y, ¿Por qué?
Pues sí. Me arruiné por un negocio que salió de pena ( una clínica dental) y tras el cual tuve que desempeñar trabajos que nunca había hecho. Pero había que pagar facturas.
Al final de mi etapa como guarda de una finca de caza en Castellón, me vino «casi» impuesto por mi necesidad económica, aceptar el reto de coger un lápiz, 17 años después de la última vez que lo hice. Casi como «último» cartucho, pero sin ninguna esperanza,… Hice un cuadro para mi jefe en la finca y a partir de ahí, todo fue vertiginoso. Sin escalas medias, empecé a vivir del arte. A los pocos meses me bautizaron en USA como El fotógrafo del lápiz. Así que dime tú si los caminos del Señor son inescrutables.
¿Qué tal le ha ido en Nueva York?
Después de exponer en Nueva York, hice muchos de los clientes para los cuales sigo trabajando por encargo hasta ahora. Así como Mejicanos, algún ruso,..
Tiene clientes en todo el mundo. ¿Cuéntenos alguna anécdota que le haya pasado con ellos?
Me han encargado trabajos muy importantes. Más que anécdotas, me quedaría con la satisfacción personal que me produce cuando esos clientes me escriben diciéndome qué les he emocionado con mi cuadro. Qué les he hecho llorar. Después de lo que he pasado me hace sentir muy orgulloso de mí mismo (no me importa reconocerlo) cuando hecho la vista atrás.
Por curiosidad, ya que pinta con carboncillo. ¿Cómo tiene las manos?
(Risas) No, no. No dibujo con carboncillo. Es demasiado grueso para mí. Dibujo exclusivamente con lápiz de grafito. O sea que no tengo las manos negras.( Risas)
Usted es hiperrealista. ¿Por qué tenemos que adquirir un cuadro suyo en lugar de hacernos una foto y utilizar la opción del photoshop ‘ausencia de color’ para dejarla en blanco y negro?
(Mira con los ojos muy abiertos, como exclamando) Me obligas a ser un pelín chulo con esa pregunta y no quisiera… Lo primero, claro que puedes hacer lo que dices. Pero también sabrías lo que tienes.( Risas)
Mientras que un cuadro mío es eso que tú dices, pero con la salvedad de que yo soy capaz de hacerlo con un simple lápiz. Creo que tiene su mérito hacer lo que hago con un lápiz de 1€, no con una cámara de réflex de 1.000€. (Risas)
De todas formas, ya que hablamos de esto, tengo que decir que desde hace poco ya estoy haciendo mis propias fotos o se las encargo a un fotógrafo profesional. Mis próximos cuadros serán salidos de mis propias ideas y gustos. Esto les dará más exclusividad y sobre todo, expresar y plasmar mis propios sentimientos.
Viene a Salamanca en febrero. ¿Por qué tenemos que ir a su curso?
Jamás estudie arte, ni un solo día asistí a ninguna clase, ni cursé la carrera de Bellas Artes. Y sin embargo, ya he sido invitado a impartir clases magistrales en Nueva York y Moscú.
Soy autodidacta y lo hago como Dios me dio a entender, con un estilo que dicen que es ya muy reconocible, tanto en los tonos como en la manera tan particular de realizarlo. No cuadriculo. Soy capaz de hacerlo a ojo, aunque a veces, me ayude tomando referencias. Empiezo por una esquina y lo termino por la otra. Como una impresora. A mitad de proceso, puedes ver medio dibujo terminado y el otro medio en blanco. Eso es lo que estoy ensenando en mis clases de Cáceres y me gustaría ensenar aquí, en Salamanca. Simplemente es diferente.
Decía Unamuno que Salamanca es tan bella que hasta el sol quería quedarse en sus piedras por el amarillo que lucen. Usted utiliza el negro y juega con el blanco para dar formas. ¿Cómo pintaría la belleza de Salamanca?
Uff. Me encantaría algún día hacer un cuadro de Salamanca. Tiene rincones que creo que con mis tonalidades podrían quedar increíbles. Sería un honor y un reto para mí plasmar la belleza de esta ciudad.
1 comentario en ««Empecé a vivir del arte. Mis clientes están en México, Estados Unidos, Rusia,…»»
Un gran artista ¡¡¡Sí señor!!! ¡Y una gran periodista!