La Comisión de Patrimonio se reúne este lunes para decidir «por unanimidad» si se quita el medallón de Franco de la Plaza Mayor y lo colocan en el Centro de la Memoria Histórica
El Medallón de Franco, esculpido y colocado en la Plaza Mayor en 1937, es obra de Miguel Huerta. Lo curioso es que su nieto realizó un índice de las obras de su abuelo y no incluyo el medallón en dicho catálogo.
Josefina Cuesta, catedrática de Historia Contemporánea de Universidad, se pregunta por qué no hay estatuas o simbología de Hitler, en Alemania o de Mussolini, en Italia y aquí, en España tenemos que tener a Franco. «Somos el único país que sigue teniendo culto al dictador».
Entre los símbolos que se conservan en Salamanca y, que si se cumpliera la ley de Memoria Histórica no deberían estar ahí, se encuentra el medallón de Franco.
El medallón está en la Plaza Mayor que es un monumento BIC -Bien de Interés Cultura- y por lo tanto intocable, pero sólo la Plaza, no los elementos que se encuentran en ella. De hecho, como señala Cuesta, el medallón de Franco se colocó en 1937, por lo que ya se ‘modificó’ la Plaza Mayor original.
Además, el medallón está colocado donde no debe. «Se encuentra en el Pabellón Real. Franco no pertenece a una Familia Real», matiza la catedrática de Historia Contemporánea.
El valor artístico que puede tener el medallón, lo cuestiona incluso su propia familia al no incluirlo dentro del catálogo de las obras del escultor Huertas.
Por último, existen precedentes de eliminación de medallones en la Plaza, el de Godoy, que los salmantinos lo eliminaron a martillazos. «Nosotros no queremos que se destruya, lo que pretendemos es que se retire de donde está y se coloque en la exposición que se hará sobre la dictadura en el Centro de la Memoria Histórica«, puntualiza Luisa Vicente, presidenta de la Asociación Memoria y Justicia de Salamanca.
¿Por qué es tan importante la retirada del Medallón?
Porque ensalza a un dictador. A una persona que llegó al poder dando un golpe de estado y mandó matar a muchas personas. Somos el segundo país en el mundo que tiene más muertos sin identificar. Cuando se dice que queremos abrir una herida, no es cierto, porque lo que intentamos es cerrarla.
Josefina Cuesta también habla de la sociabilidad de la ciudad. «Si un niño de seis años pasa por la plaza de la Libertad o de la Constitución esas palabras formarán parte de su vida, pero si lo que tiene son símbolos de una dictadura, crecerá con ello. Lo más antidemocrático que hay, es llegar al poder dando un golpe de Estado, como hizo Franco».
2 comentarios en ««Somos el único país que sigue teniendo culto al dictador»»
No Josefina, no es culto. Es historia. Y tu deberias saberlo
Estimada Señora Cuesta:
Los que no somos tan «cultos» como usted sabemos buscar en el Google…y si ponemos «Museo del Holocausto»…pues se puede pasar días y días leyendo sobre el Holocausto. Si prefiere poner «Campos de Concentración»…pues más de lo mismo.
Quizás lo que tendría que estar haciendo una profesora de historia es hacer el gran congreso internacional sobre el franquismo y que vengan a Salamanca todos los que tengan algo que decir sobre esa parte de la «Historia» de España. Parece que los únicos que «adoran» a Franco son unos cuantos que pretenden «esconder» la historia al pueblo llano.
La Historia en Salamanca está escrita en piedra y así encontramos yugos y flechas por muchos lugares y el medallón de los Reyes Católicos en la famosa fachada de la Universidad…y a los judíos no les hace pizca de gracias. También podemos encontrar otros medallones como como el de Godoy y que los estudiantes acuchillaron por afrancesado…y muchos y muchos símbolos que están ahí…para que el «pueblo» llano aprenda Historia sin tener que ir a escucharla a la Universidad.
Ahora, si lo que pretende es esconder en un «museo» cerrado solamente a profesores universitarios y que estos nos cuenten «su» verdad única y exclusiva…pues que quiere que le diga…que prefiero seguir viendo el medallón de Franco en la Plaza Mayor…e incluso «tiznado» de rojo…para que cuando vengan los «niños» y las «niñas»…les cuente mi versión de la historia…ya que la «Historia» es historia…ya pasó…nos guste o no nos guste.
Señora Catedrática…los jóvenes dicen que Salamanca no se está muriendo…la están matando…y parece que son muchos los aprietan cada día más para que desaparezca lo mejor que tenemos…nuestras calles, nuestros edificios…esculpidos muchos de ellos en «piedra de Villamayor»…pura historia «viva» a pie de «calle».
¿Para cuándo el gran congreso sobre esta parte de la Historia de España…llenando una semana la Universidad, los hoteles, los comercios y las calles…de todos aquellos que tengan algo que decir y que pase a ser «historia» de verdad?.