El Avenida volvió a curar este domingo sus heridas de la Euroliga con una reconfortante victoria en Liga, una más, aunque en esta ocasión con mucho sufrimiento.
El Zamarat llegó a Würzburg dispuesto a aprovecharse de la fatiga de las azulonas en su viaje a Rusia y de su derrota en la máxima competición europea, y forzó el desenlace del partido en el último minuto, al que se llegó con una igualdad no apta para cardiacos.
Un arreón final de las locales, con el graderío enloquecido permitió salvar la victoria (80-73), una más del líder de la liga regular.