El presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, ha participado este miércoles en la reunión anual del Foro Económico Mundial que tiene lugar en Davos-Klosters (Suiza).
Galán ha defendido la descarbonización del sector energético como medida esencial para alcanzar los objetivos del Acuerdo de París, teniendo en cuenta que dos terceras partes de las emisiones de gases de efecto invernadero están relacionadas con la energía.
El presidente de Iberdrola ha planteado un escenario para los próximos 25 años que estará marcado por la necesidad de reducir a casi la mitad las emisiones para atajar a tiempo el cambio climático, periodo en que el consumo energético, si la evolución se mantiene como hasta ahora, también se habrá elevado en torno al 45%.
“Para resolver esta ecuación vamos a necesitar una enorme transformación energética, que aumente la eficiencia y cambie sustancialmente el mix hacia una mayor contribución de las energías con bajas emisiones”, ha explicado Ignacio Galán.
La electricidad, que es actualmente responsable de cerca del 33% de las emisiones globales -casi la mitad de las emisiones energéticas-, puede contribuir a la descarbonización más que ninguna otra fuente de energía o sector gracias a las renovables, ha considerado.
En este sentido, en un escenario de pleno cumplimiento del Acuerdo de París, la electricidad supondrá más de dos terceras partes del incremento de la energía demandada a lo largo del próximo cuarto de siglo y, aun así, de cada tres toneladas reducidas de CO2, el sector eléctrico aportará dos.
Energías limpias
En otras palabras, “cumplir con los objetivos de emisiones solo será posible a través de la masiva electrificación de la economía, con la aportación de más energías limpias, sobre todo hidroeléctrica, eólica y solar; más capacidad de almacenamiento, dada la imprevisibilidad natural de la mayoría de tecnologías renovables; y más redes de distribución más inteligentes, al tiempo que se permite una participación activa de los consumidores”, ha explicado.
Las inversiones que requiere el sector eléctrico para los próximos 25 años alcanzarán los 19 billones de dólares, casi duplicando las cantidades ya invertidas en el sector. “Solo hay una forma de atraer esta masiva cantidad de capital: planificar un proceso energético adecuado y definir un marco regulatorio suficiente, estable y predecible”, ha concluido el presidente de Iberdrola.