El subdelegado del Gobierno en Salamanca, Antonio Andrés Laso, ha mantenido este martes la primera reunión de trabajo con el comisario jefe provincial del Cuerpo Nacional de Policía, Francisco Martín Ancín, en la que han abordado diferentes aspectos relacionados con las actividades y situación de este cuerpo de Seguridad del Estado en sus ámbitos de actuación (Salamanca, Béjar y puesto fronterizo de Fuentes de Oñoro) y, singularmente, en Salamanca capital.
Después de ese análisis general, que conduce a asegurar que Salamanca puede considerarse como una ciudad segura, con índices de criminalidad por debajo de la media regional y nacional, el subdelegado del Gobierno centró su atención en el último incidente que se ha registrado en el barrio de San José. Concretamente, el tiroteo que se produjo en la noche del pasado domingo, 12 de febrero, en la calle Maestro Salinas.
Las pesquisas realizadas por la Policía Nacional ha permitido la identificación de los supuestos autores, dato que se incorporará al procedimiento que el subdelegado del Gobierno ha ordenado que se inicie.
Al expediente se incorporarán la documentación e informes que proceda aportar -elaborados por la Policía Nacional y por la Policía Local de Salamanca- al considerar que se han causado desórdenes en la vía pública con alteración grave de la seguridad ciudadana, y se instruirá conforme a lo establecido en la Ley de Protección de la Seguridad Ciudadana.
En su artículo 36 tipifica las infracciones graves, que en su grado medio suponen una multa que puede ir de 10.401 a 20.200 euros.