CSIF afirma que lo que debe hacer Sacyl es tomar medidas para reducir y evitar las agresiones que sufren los profesionales sanitarios, ya que el sindicato independiente alerta del “continuado incremento de las agresiones que se vienen produciendo en los últimos años, que tiene que ver con los recortes que se están produciendo y, por lo tanto, a la organización y a la estructura, que está afectando a la calidad de los servicios sanitarios”.
El propio observatorio de la Junta refleja un incremento del 22% de incidentes y de un 37% del personal sanitario agredido en los últimos cinco años, de 2012 a 2016. En concreto, el número de incidencias, en estos últimos cinco años, han sido 331 (2012), 360 (2013), 375 (2014), 389 (2015) y 427 (2016). En cuanto a los profesionales agredidos, la progresión de las cifras son 389, 432, 435, 461 y 525.
Respecto al último año, de 2015 a 2016, el incremento de los profesionales agredidos ha sido de casi un 14%, siendo Enfermería el sector más afectado. De este total de agredidos, 427 han sido mujeres, es decir, un 83,5% del total.
CSIF considera estos datos “inaceptables e injustificables”, por lo que reclama “a los responsables políticos, y no sólo a los de la administración sanitaria, la adopción de medidas preventivas y coercitivas eficaces”, como es la presencia de seguridad privada en los centros, especialmente en los servicios de mayor afectación (Psiquiatría y Urgencias).