«Tenemos que devolver el fútbol profesional a la ciudad»

[dropcap]L[/dropcap]a conversación con el presidente del Club de Fútbol Salmantino transcurre en el Helmántico de una manera tranquila. Durante la charla se habló de la violencia en el deporte, de las aspiraciones del club y de reutilizar el estado porque «es un lugar que puede albergar cualquier tipo de acontecimiento que sea positivo para la ciudad»

Carlos, cuéntenos como se pasa de estar en las categorías más bajas del fútbol nacional a tener una cierta aspiración de jugar a otro nivel…
Puedo hablar de nuestra experiencia. Nosotros somos un club que tenemos una memoria y una historia. Lo que hemos hecho ha sido recoger esa historia y memoria y seguir con su misma intensidad y con los mismos objetivos, que no nos los encontramos en el camino, sino que estaban dentro de nuestro ADN.

¿Qué parte ocupa El Helmántico en la estrategia del club?
Ha sido fundamental. Volver a jugar en el Helmantico y que la afición ocupe la grada… nos ha puesto un aliciente, no sólo para el primer equipo, también para la cantera y los seguidores. Por eso, la masa social ha ido creciendo y el club también. Hemos hecho una temporada muy buena, porque hemos trabajado muchísimo todos. Esto nos hace pensar que podemos seguir creciendo con la ayuda de la afición de Salamanca para recuperar las categorías profesionales.

¿Por qué misión trabajan en el club?
El Salmantino nace por una decisión de la UDS de separar de la liquidación al Salamanca B y a su cantera. Esa separación se hace y se autoriza dentro del concurso, que deja al Salamanca B vivo, no lo liquida. Esa es la misión que tenemos que hacer. Es decir, trabajar y hacer que el Salamanca B vuelva a las máximas categorías y devolver el fútbol profesional a la ciudad. Esa es la misión que tenemos. El Salamanca B quedó alojado en el Salmantino que se refunda en la Fundación Unión Deportiva Salamanca y a partir de aquí, lo que hay que hacer es seguir contando la historia.

Habla de la Fundación, ¿qué cree usted que está aportando el Salmantino para recoger el espíritu que dejo la UDS?
Al final, eso lo decidirá la afición y la historia a medida que vayamos escribiéndola y cómo transcurran las próximas temporadas. Creo que todavía no hemos hecho nada. Tenemos que seguir trabajando y creo que vamos en la buena dirección. Pero, será la afición, la historia, el trabajo, el futuro y cómo vayan las próximas temporadas lo importante.

¿Cómo se siente en el palco cuando ve que Tribuna está llena de colores?
Es una visión muy positiva.

¿Le gustaría estar con la hinchada fuera del protocolo del palco?
Siempre me gustaría estar como aficionado y ver el fútbol con mi hijo. El palco es una representación para el que viene a visitarnos y hay que entenderlo como una deferencia al que acude al estado. Nuestro club tiene una serie de protocolos que hay que cumplir. Pero, cualquier presidente de un equipo, esté en la categoría que esté, lo primero es un aficionado. Luego vienen las responsabilidades y te hacen ver el fútbol de otra manera.

¿Sueña con ver el Helmántico como en el partido de la Copa del Rey?
Eso lo sueña cualquier salmantino o aficionado al fútbol.

Hablando del estadio. ¿No cree que está un poco desaprovechado, solo utilizándolo para jugar al fútbol?
El Helmántico tiene que ser un motor fundamental para la sociedad salmantina. Es un estadio con casi 18.000 asientos. Es un lugar que puede albergar cualquier tipo de acontecimiento que sea positivo para la ciudad y lógicamente, todo lo que se celebre en el Helmántico, repercute para bien en la economía salmantina.

Lo mismo que si se sube a categorías profesionales…
Exactamente. El fútbol genera negocio en esas categorías y sobre todo, lleva el nombre de la ciudad. No es lo mismo que una ciudad tenga su equipo en Primera División. ¡Mira Eibar!, una ciudad que está en boca de toda España. Es bueno para los industriales, el turismo, la hostelería,… Al final, el fútbol es un generador de ingresos. Nosotros, esa conciencia sí la tenemos, y esa responsabilidad también. Trabajaremos para llevar el club a las máximas categorías posibles, sabiendo que todo esto va a redundar en beneficio de todos los salmantinos.

¿Por qué cree que el fútbol genera tantas pasiones?
Porque el fútbol es pasión. Quizá el fútbol tiene un plus más que otros deportes porque está más arraigado en nosotros. Todos tenemos un club de referencia, uno que nos gusta, unos jugadores… El fútbol, para los que nos gusta, es pasional. Quizá por la incertidumbre que tiene, al final es un balón, son once contra once…

¿Cómo controlaría usted los delirios malos que hay en algunas gradas?
Afortunadamente no tengo experiencias malas, no los he sufrido. Hoy por hoy, nuestra afición está basada en familias y es una afición maravillosa. Las peñas que tenemos son magníficas, de carácter lúdico. No tenemos intención de tener radicales entre los seguidores. Eso sí, condeno cualquier actitud deplorable. El fútbol no tiene porqué llegar a esos extremos. Los estadios de fútbol debe de ser un lugar donde se tiene que convivir, defendiendo tus colores y animando, pero no tiene que generar filias o fobias.

Usted juega al golf. ¿Le ha ayudado a templar los nervios este deporte donde la concentración consigue golpes?
El golf es un deporte precioso, es muy individual, lo que hagas es para ti, no como en el fútbol que es un equipo. Gana y pierde el equipo. Aún así, siendo uno un deporte individual y el otro colectivo tienes que estar tranquilo en ambos para poder disfrutarlo y hacer las cosas bien. El fútbol son momentos puntuales, te acuerdas de jugadas,… Eso como aficionado. Como presidente, el golf me ayuda a tener la mente más despejada y con más capacidad de concentración y eso, siempre es positivo.

Juega al golf con Bernd Schuster. ¿Hablan más de golf o de fútbol?
De las dos cosas. De fútbol hablamos mucho.

¿Le ha pedido alguna vez consejo?
Siempre le pido consejos.

¿Los sigue?
Es una persona muy sabia y de fútbol sabe mucho.

¿Lo ficharía como entrenador?
¿Cómo me pregunta esos? (Risas)

¿…?
A cierra ojos. (Carcajada)