La banda terrorista ETA escenificó este sábado la entrega de las armas y explosivos que controla, ocultas en ocho zulos del país vasco-francés.
A las 8.10 horas de este sábado cambió de manos en el Ayuntamiento de Bayona el dossier que contiene la ubicación de ocho depósitos de armas.
Los ‘artesanos de la paz’, los miembros de la sociedad civil que trabajan desde hace meses en el desarme de ETA, entregaron los documentos a dos personalidades internacionales, Matteo Zuppi, representante del Vaticano que llegó en un jet privado sólo momentos antes, y el pastor Harold Good, que había contribuido al desarme del Ejército republicano irlandés (IRA).
A la ceremonia solo estaban invitados representantes de tres medios de comunicación, la BBC, The Guardian y Le Monde.
El presidente de la comisión internacional de verificación, Ram Manikkalingam, de Sri Lanka, recibió muy ceremoniosamente de manos del alcalde de Bayona (centroderecha), Jean René Etchegaray, las ocho carpetas azules con planos y fotos con la ubicación de las cajas de armas, así como listados con las cantidades de explosivos y varias pistolas, rifles, detonadores y explosivos.
A las 8 h 30, el dossier ya estaba en manos de las autoridades francesas. Los jueces que tutelan el proceso ordenaron inmediatamente la incautación de estas armas y a las 9 horas se desplegó un dispositivo policial para localizar con precisión depósitos de armas.
En ellos habría 120 armas y tres toneladas de explosivos (y varios miles de municiones y detonadores), una cifra inferior a la estimada por fuentes de la lucha antiterrorista sobre el arsenal de ETA, 200 armas de fuego y entre 4 y 5 toneladas de explosivos.
Se han desplegado 172 «observadores» en los lugares donde están los depósitos de ETA para «acreditar y comprobar que son las autoridades francesas las que se van a adueñar» de los arsenales, el coordinador de la Comisión Internacional de Verificación, Ram Manikkalingam.