La Dirección General de Tráfico ha puesto este martes en funcionamiento las cámaras que controlan de modo automatizado el uso del cinturón de seguridad por parte de los conductores.
Son 225 cámaras, colocadas en pórticos o postes, de las cuales el 60% están ubicadas en vías convencionales que son las que registran mayor accidentalidad y siniestralidad y el 40% restante en vías de alta ocupación.
Con el objetivo de que el uso de este dispositivo de seguridad se generalice entre todos los ocupantes del vehículo, los conductores que circulen sin llevar puesto el cinturón de seguridad y sean captados los dos primeros meses por las cámaras recibirán una carta informativa, comunicándoles que circulaban sin hacer uso de dicho dispositivo de seguridad, elemento que reduce en un 60% la posibilidad de fallecer en caso de accidente.
Durante la fase informativa, cuya duración prevista es de dos meses, no se iniciará procedimiento sancionador, porque el objetivo primordial es concienciar a todos los conductores de la necesidad de que utilicen el cinturón de seguridad.
Una vez finalizada la fase de concienciación se dará paso a la fase de denuncia de la infracción, y aquellos conductores que sean captados por las cámaras sin llevar debidamente abrochado el cinturón de seguridad recibirán la denuncia correspondiente: 200 € y la detracción de 3 puntos.
Las dos cámaras instaladas en Salamanca están en el pórtico de la A-62, viniendo de Valladolid, justo antes del desvío para el polígono de los Villares (kilómetro 233,5), y en el mismo kilómetro de la N-620, sentido Valladolid.