[dropcap]L[/dropcap]as esperanzas de los salmantinos se supone que debían de estar anoche con Víctor Gutiérrez en la final del programa de cocina ‘Top Chef’, de Atresmedia.
Trece son las semanas en las que Víctor Gutiérrez ha defendido tras los fogones del programa su valía para la cocina. Tras pasar un gran número de pruebas, tanto individuales como por grupos, ha conseguido deshacerse de casi todos los rivales consiguiendo un puesto para la final del concurso. Una final llena de emociones donde Alberto Chicote proclamó a Rakel Cernicharo como ganadora de la cuarta edición del programa culinario.
Antes de levantar el cuchillo que les indicaba en qué puesto habían quedado, las palabras de Víctor fueron: «Si levanto el dorado, será el momento más feliz de mi vida, y si eso implica llorar, voy a llorar muchísimo». Lamentablemente el cuchillo con la hoja dorada no era el suyo.
Ambos concursantes han sabido demostrar que llevan la cocina en sus venas, aunque han dejado claro que son personas con carácteres complicados. Pero a pesar de ello, ha quedado claro que en la cocina no todo es ser un ‘buenazo’. Hay que demostrar carácter, competitividad y estar decidido a acabar la prueba dando todo.