Madrid se convirtió este sábado en la capital del orgullo mundial del colectivo LGTBI+, que cerró una semana de celebraciones con una gran marcha festiva por el centro de la capital. Este año, por primera vez, el PP se sumó a la marcha inicial en cuya cabecera estaban los partidos políticos, sindicatos, organizaciones sociales y colectivos LGTBI.
Esta manifestación sirvió para reivindicar la libertad sexual en todos los países (se celebra en Madrid el World Pride) bajo el lema Por los derechos LGTBI en todo el mundo.
Este año participaron representantes de todos los partidos, incluido el PP, que se ha estrenado en este evento, y al que se incorporó en el último momento la presidenta de la Comunidad de Madrid, que hace unos días dijo que si iba sería «distorsionador» y acabó micrófono en mano dando un mitin a los asistentes tras comprobar le éxito de la marcha.
Tras la manifestación, el desfile festivo de 52 carrozas llenaron de colorido esta celebración, seguida igualmente por miles de personas desde las aceras.
El evento se ha desarrollado bajo un enorme dispositivo de seguridad formado por casi 3.500 efectivos que han vigilado la manifestación, una marcha que ha estado vallada por primera vez en el tramo de desfile de carrozas y cuyas intersecciones en el itinerario estarán protegidas por vehículos y elementos disuasorios.
