[dropcap]A[/dropcap]l buen hambre no hay pan duro que dice el refrán, o parafraseandolo… cuando hace calor, no hay fuente mala para refrescarse
A eso de las 18.30 horas, las personas que se encontraban en la plaza del Oeste vieron como un joven se descalzaba, quitaba la camiseta y se metía en la fuente que hay en dicha fuente. Se refrescaba durante unos minutos y después, de un brinco salía de la misma.
Lo que notaron los voyeurs es que el bañista salió mucho más relajado y calmado que cuando entró en el agua. Y, es que hace calor, mucho y más a media tarde, es casi de obligado cumplimiento refrescarse