La Asociación Ciudadanos por la Defensa del Patrimonio se ha dirigido a las administraciones competentes en materia de patrimonio histórico para solicitar la protección integral de los restos arqueológicos descubiertos en las últimas semanas en el lugar en el que se encontraba el popular bar «Sebas» (Calle San Pablo esquina con Calle San Buenaventura), perteneciente a la zona de cautela extensiva delimitada en el vigente Plan General.
Los restos descubiertos continúan la traza estudiada y documentada de la parcela segregada a la Casa de los Niños de Coro para la construcción de la antigua sede de la Fundación del Colegio de Arquitectos, cuyo uso recientemente ha cambiado, los cuáles fueron destruidos. En ese espacio aparecieron restos de época romana, medieval y moderna de varias viviendas, además de la canalización y encauzamiento de la alberca de Santo Domingo, que permitían conocer el desarrollo urbanístico de ese ámbito de la ciudad desde los primeros pobladores del mismo.
De acuerdo con el Plan General de Ordenación Urbana de Salamanca, son elementos a proteger «los yacimientos o áreas arqueológicas tanto los conocidos como aquellos que sean previsibles a la luz de la investigación documental disponible», además de la estipulación de una Norma General de Alerta que afecta «a los espacios libres, solares y edificios existentes en orden a asegurar la conservación de restos arqueológicos».
Según el artículo 4.5.3.1 del Plan General de Ordenación Urbana, reciben protección integral «los restos arqueológicos de objetiva y probada relevancia ya constatada, con un grado de conservación y entidad histórica tales que requieren su protección integral, libres de edificación o incluidos en sótanos visitables, con el objeto de procurar la necesaria proyección social, atendiendo, fundamentalmente a su gran interés científico para el conocimiento de los orígenes de la ciudad de Salamanca, de su desarrollo posterior, de su trama urbana, o de edificios de gran importancia histórica o artística que fueron posteriormente demolidos pero cuyas trazas, cimentaciones y elementos asociados permanecen en el subsuelo».
Estos restos arqueológicos «quedarán íntegramente protegidos, y no se permitirá ningún tipo de obra que suponga alteración o remoción de los mismos, salvo todas aquellas encaminadas a su excavación arqueológica con fines científicos, conservación, restauración, integración y eventualmente musealización». «La construcción lucrativa sobre rasante mediante estructuras de pilotes diáfanos con la menor incidencia posible sobre los restos conservados, que en todo caso no admitirán otros usos que los de su propia exposición al público».
La Asociación, apoyada por el planeamiento vigente, ha solicitado la protección integral de los restos descubiertos, que se habilite la visita pública a los mismos y la señalización de los mismos en un rico contexto para el patrimonio y la investigación arqueológica; también para que los habitantes y visitantes tengan un mejor conocimiento del desarrollo y de la historia de Salamanca, dada la escasa conservación y muestra de restos arqueológicos en general y de época romana en particular en nuestra ciudad.
El rincón de Sebas
El establecimiento ‘El rincón de Sebas’ se encontraba en el local del edificio catalogado con protección Ambiental A, sito en el número 2 de la Calle San Buenaventura, y que destacaba por sus singulares esgrafiados. Dicha catalogación no ha sido suficiente como para impedir que, precisamente la fachada, fuese derribada después de que durante varios años se mantuviese apuntalada.