[dropcap]E[/dropcap]l rey emérito, pese a que no le gusta este sobrenombre, pero es así, ha pasado unos días en Irlanda, eso está bien, pero no se llevó a la reina emérita, prefirió la compañía de su sempiterna amiga Marta Gayá
¡Qué bien vivíamos sin móviles! Esto mismo es lo que debe de haber pensado don Juan Carlos cuando se ha visto protagonizando casi el vídeo del verano.
Es conocida la gran facilidad que tiene el monarca para empatizar con el género femenino, más aún si son altas, delgadas, rubias y simpáticas. A sus 79 años largos, sus gustos por estas mujeres apuestas y atractivas continúa intacto.
Al menos es lo que se ha visto este verano, cuando don Juan Carlos se acercó hasta el municipio de Clonmellon, en Irlanda, con una distinguida conocida suya, la balear Marta Gayá, con la que tiene una entrañable amistad desde hace tres décadas, o casi.
Precisamente, hasta ese rincón de Irlanda se marchó la pareja y otros amigos, para ver la reapertura de la iglesia de San Juan Bautista, rehabilitada por el banquero mexicano Allen de Jesús Sanginés-Krause.
Lo que menos se esperaba don Juan Carlos es que una mujer, Marian Tighe, y su móvil desvelaran al mundo entero que él y su amiga íntima habían pasado en Irlanda unos días entrañables.
Lo mejor de todo es que Marian Tighe ha tenido los 15 minutos de fama que pregonaba Warhol. La han llamado de todas las cadenas de Inglaterra y le han hecho entrevista y su vídeo tiene más de 23.500 visitas y subiendo.
Mientras el padre de Felipe VI disfrutaba de sus vacaciones privadas, doña Sofía atendía, cual abuela solícita y servicial, a sus nietos en el palacio de Marivent, Mallorca, y sostiene regiamente el peso de la corona.