Gabriel de la Mora, diputado provincial de Ganemos Salamanca en la Diputación, ha presentado una batería de propuestas para modificar la dinámica de la feria Salamaq. Estas medidas tendrían como objetivo que la feria fuera un escaparate de los productos de la provincia salmantina y que sirviera de herramienta para los profesionales del campo.
El diputado considera que Salamaq 2017 repite el mismo modelo de años anteriores, por lo que ha propuesto llevar a cabo una feria “distinta” que persiga un doble fin: que esté dirigida a los profesionales de la agricultura y la ganadería para servirles como herramienta y que sirva de escaparate de la provincia para mostrar sus productos.
En primer lugar, ha propuesto realizar jornadas especiales. Por un lado, recuperar la jornada dedicada al hombre y la mujer del campo con actividades destinadas a analizar y debatir sobre la situación social, económica, política y cultural de las personas que viven del campo. Por otro lado, realizar jornadas para cada comarca agraria en la que cada día estuviera dedicado a una zona agroecológica (como la meseta, las dehesas, Las Arribes y las sierras) y hacer una jornada de internalización fusionando los días de Portugal y Aquitania.
En segundo lugar, ha celebrado un decálogo de mejoras en el que incluye propuestas como: hacer una feria más transparente y participativa, implicar a profesionales especialistas en la organización, separar los horarios para profesionales y público, hacer espacios de producción ecológica, dedicar un puesto a la finca de Castro-Enríquez, fomentar los puntos de encuentro entre profesionales, aumentar la presencia de instalaciones y tecnologías ganaderas, orientar las jornadas técnicas a los intereses generales, presentar proyectos de innovación que puedan ser útiles y hacer más diferenciación entre el ganado expuesto al público y el orientado a venta.
El diputado considera que son medidas realizables que han gustado a otros miembros de la institución. También ha añadido que se podrían recortar un 20% de gastos que no son necesarios, ya que la feria siempre presenta pérdidas.
Texto: Paula Castro Morán