[dropcap]A[/dropcap]nda el humano últimamente tan entretenido en la búsqueda de la verdad (razón) absoluta que le resulta harto difícil discernir cuando lo logra. Hay quien receta antihistamínicos de parafarmacia en versión gragea o hasta como vial intravenoso.
Se le presupone, a la verdad, el paranormal poder de ser respuesta, pero esto es toda una contradicción. Básicamente porque la respuesta buena será la que nos gusta, no tanto la verdad. Hay verdades que duelen, pueden decir los teóricos de la conspiración. Contradictorio por ilógico, ya que una respuesta en sí misma, no debería tener la capacidad innata de doler. Si es cierto, cierto es.
Olvidémonos pues de las verdades, ya que no hay ningún estante en tienda alguna donde adquirirlas en versión absoluta. Para nosotros, esos seres que venimos con una configuración de fábrica idéntica con mínimas variaciones y permutas en la carcasa, ya sea por su variedad en colores o acabados, se nos ha reservado en premiere la capacidad de buscar respuestas. No verdades. No nos da. Eso es para los animales. Tengo hambre, como. Tengo miedo, huyo o me defiendo, tengo sueño, duermo, llueve, espero a que escampe. Me pilló al aire libre, a secarse tocan.
¿Cómo saber si una respuesta es buena? ¡Ay si yo lo supiera! Lo compartiría contigo a la primera oportunidad. Me inclino del lado que dice que solo podemos responder con incierta garantía de éxito a lo que observamos. Valga el ver como delegado del resto de capacidades sensoriales. Y es tan simple de hacer que ni siquiera se necesitan ojos, te lo demostraría en Braille si supiera. Por eso, quien se dice que no es capaz de hallar una respuesta, sencillamente miente.
A suponer que tampoco debe de ser tan malo eso de mentirijillear cuando nos lo hacemos a nosotros mismos con plausible generosidad. A ver… ¿Qué hay de malo en lanzar una afirmación que no contiene más que una ínfima sospecha de que, en todo o en parte, existe alguna pequeña, mínima, ligera, intranscendente, inocua o irrelevante falsedad, esperando que los oyentes le crean, de forma que se oculte la realidad en forma parcial o total? Psé… Terminaremos por creerlo nosotros mismos y dejará de ser mínima, ligera, intranscendente, inocua e irrelevantemente falso. Conquistará su derecho de verdad.
¿Qué pasa entonces? ¿Por qué (nos) mentimos? ¿Por qué se hace tan complicado encontrar respuestas? Sospecho que por dos motivos, básicamente: no encontramos las que nos gustan y no nos gustan las que encontramos. Y a la inversa también será cuestionable. Cuando encontramos una que nos satisface dejamos de buscar y por lo tanto terminamos por cortar por lo sano con la posibilidad de tropezar con la buena.
Si. Satisfactorio no es siempre sinónimo de bueno, pertinente, favorecedor, conveniente, adecuado, embellecedor, apropiado, idóneo, indicado, acertado, feliz, oportuno, eficaz, acertado, atinado, adecuado, debido, oportuno, conveniente, adecuado, correcto, ajustado, justo, cabal, razonable, preciso, oportuno, adecuado, concorde, conforme, conveniente…
Se me permita la dedicatoria. A Carles y Mariano. Tanto montes, montes tanto.
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