Miles de personas —950.000 según la plataforma Sociedad Civil Catalana y 350.000, según la Guardia Urbana— se han manifestado este domingo en Barcelona en contra de la independencia de Cataluña y a favor de la unidad de España.
La manifestación ha contado con los catalanes que representan a esa mayoría silenciosa que hasta ahora estaba siendo desbordada por los independentistas, y por ciudadanos llegados de distintos puntos del país que han querido ir para mostrarle su apoyo.
Los participantes llevaban banderas españolas, catalanas y europeas en una movilización convocada bajo el lema ‘¡Basta! Recuperemos la sensatez’ en la que se escucharon numerosos canticos contra los independentistas y Carles Puigdemont.
La protesta estaba convocada por el movimiento Sociedad Civil, pero ha contado con el apoyo del PP, C’s y del PSC.
Se ha producido dos días antes de que Puigdemont comparezca en el pleno del Parlament para hablar del resultado del referéndum simbólico del 1-O, en el que la CUP pretende que se declare la independencia de Cataluña.
También tiene lugar en medio de la oleada de fugas de grandes empresas radicadas en Barcelona que han trasladado su sede fiscal a otras provincias en busca de seguridad jurídica por si se proclamara la independencia unilateralmente, y de otras que han anunciado que lo harán.
Al final de la marcha tomaron la palabra Mario Vargas Llosa y Josep Borrell, quien se dirigió precisamente a esas empresas para decirles que si no podían haberlo anunciado antes, porque eso habría bajado mucho los ánimos de los independentistas menos recalcitrantes y nos podíamos haber evitado algunas situaciones.
