Salamanca homenajea al poeta Remigio González Martín, conocido como Adares, con una escultura firmada por Agustín Casillas que se ha ubicado en la Plaza del Corrillo. La estatua representa al autor en su tradicional paseo por Salamanca, en el que caminaba desde San Justo hasta la Plaza del Corrillo, donde se sentaba a diario para vender libros de su poesía.
El alcalde de Salamanca, Alfonso Fernández Mañueco, acompañado por los familiares de Adares y Agustín Casillas, ha descubierto la nueva escultura que desde este miércoles será parte del patrimonio salmantino. Se trata de un reconocimiento tanto al artista escultor, Medalla de Oro de la ciudad, como al poeta, quien falleció hace 17 años.
La pieza, de dos metros de altura y casi un metro de ancho, está fabricada en bronce y representa al autor con su característica barba, gorra con visera, bufanda y el zurrón en el que guardaba sus poemas. Se ha ubicado en la Plaza del Corrillo, un lugar que el autor calificaba como su “cátedra de poesía” y que frecuentó diariamente hasta su deceso.
El autor de la escultura, quien también falleció hace un año, es famoso por ser artífice de otras piezas fundamentales de la ciudad, como el busto de La Celestina que está en el Huerto de Calixto y Melibea, el Lazarillo y el ciego que se encuentran a la entrada del Puente Romano o el medallón dedicado a Cervantes que se puede ver en la Plaza Mayor.
Esta escultura se suma ala que hace una semana se colocó en la plaza del Mercado en honor a las turroneras de La Alberca, las dos del mismo autor plantadas en la entrada del museo del comercio, y la de Mayoral dedicada a Del Bosque que próximamente se instalará en otro punto de la ciudad.
Texto y foto: Paula Castro Morán