La Guardia Civil ha localizado este domingo el cadáver de Diana Quer en un pozo de una fábrica abandonada en el pueblo de los padres de ‘El Chicle’.
José Enrique Abuín Gey se derrumbó finalmente en el interrogatorio de la Guardia Civil, más aún tras saber que se había quedado sin coartada cuando su mujer, también detenida, cambió su versión inicial y confesó que la noche de los hechos su marido no estuvo con ella.
Al verse acorralado acabó confesando el lugar donde arrojó el cuerpo sin vida de la joven Madrileña desaparecida el 20 de agosto de 2016, cuando regresaba de las fiestas de A Pobra do Caramiñal (A Coruña).
El cadáver estaba oculto en Asados (Rianxo), a 200 metros de la casa de los padres de, ‘El Chicle’, en el pozo de una fábrica de muebles abandonada.
Fue el propio detenido el que llevó a la Guardia Civil al lugar donde se encontraba el cuerpo, cuya identidad aún debe ser confirmada por los análisis forenses.
El Chicle fue detenido este viernes por un intento de secuestro cuchillo en mano a una joven en Boiro, a quince kilómetros de Rianxo, municipio de residencia del sospechoso.
Los agentes, que tenían fundadas sospechas de que El Chicle era el autor de la desaparición de Diana Quer, necesitaban un paso en falso para poder detenerlo. Cuando declaró hace meses por la desaparición de la joven madrileña su mujer lo encubrió y le proporcionó una coartada que impidió su detención. Dijo que había pasado la noche con él y se bloqueó la investigación, ante la falta de más pruebas.
Tras el suceso del pasado 26 de diciembre, fueron detenidos El Chicle y su mujer, como sospechosos, asimismo, de la desaparición de Diana Quer y, su esposa, por encubrimiento. Ella acabó confesando la mentira y desencadenó el final del caso.
