Un hombre de 44 años ha muerto tras permanecer cinco horas en el hospital de Antequera con un ictus y sin recibir asistencia.
La víctima, que fue evacuada al hospital Carlos Haya de Málaga cuando se detectó su presencia en la sala de urgencias del complejo sanitario de Antequera, finalmente falleció este viernes.
El hombre se sintió indispuesto el pasado 11 de enero mientras estaba en su puesto de trabajo, por lo que acudió a una farmacia para tomarse la tensión y allí le aconsejaron que acudiera al hospital. Acudió al hospital de Anterquera a mediodía quejándose de un fuerte dolor de cabeza, desorientación y tensión alta.
Pero permaneció «más de cinco horas infartado por un ictus cerebral sin que nadie se diera cuenta, ni se le prestara ninguna atención médica o se controlara adecuadamente», denuncia su familia.
La hicieron análisis y un electrocardiograma, tras lo cual le pidieron que pasara la sala de espera de urgencias hasta recibir los resultados. Pero no llegaban.
La familia, que no sabía nada, trató de localizarlo y dio con él cuando llamaron al hospital, donde les dijeron que había abandonado urgencias. Los familiares siguieron buscándolo pero sin resultados, hasta que decidieron ir al hospital. Allí, otros usuarios les dijeron que había estado varias horas en la sala de espera, sin atención médica, «como adormilado».
Al parecer sobre las 17:30 horas, un testigo que había en la sala de espera avisó a un celador, que comprobó su nombre en la pulsera que portaba. Fue evacuado al hospital de Málaga, donde ya fue intervenido, pero falleció este viernes.