El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) ha anulado el Plan de Aprovechamientos Comarcales del Lobo en los territorios cinegéticos situados al norte del río Duero para la temporada 2015-2016, dos años después de que se autorizara el cupo de caza en las diferentes provincias.
Sucede justo un mes después de que el mismo tribunal dejara sin validez el decreto por el que se aprobó el Plan del Lobo, y que la Junta achacó a trámites formales.
Así, ahora el juez deja sin validez la resolución de 31 de julio de 2015 de la Dirección General del Medio Natural que daba luz verde al cupo de caza, según informó la Asociación Conservacionista ‘La Manada’, con la dirección técnica de ASCEL, autores del recurso Contencioso-Administrativo.
La sentencia anula el Plan en la temporada 2015-2016, a pesar de que la Junta “arguía”, prosiguen las organizaciones ecologistas, “que no tenía sentido dado que ya estaba en vigor un nuevo programa de matanzas 2016-2019”, contra el cual ASCEL tiene interpuesto otro recurso, pendiente de sentencia por la misma sala.
El tribunal rechaza así la causa de “inadmisibilidad invocada” que planteaba la Junta y estima el recurso interpuesto para anular “por su disconformidad con el ordenamiento jurídico las resoluciones recurridas”. La sentencia no es firma y contra la misma cabe recurso de casación.
Este “nuevo varapalo judicial”, tal y como los definen los conservacionistas, “refleja que el entramado que la Junta y el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha estado poniendo en práctica desde el año 2015 contra el lobo ibérico en Castilla y León es puro papel mojado, es un castillo de naipes que se desvanece ante reiteradas sentencias judiciales”. Ello es consecuencia de la “acción de la sociedad civil organizada, que demanda el cumplimiento de la protección legal del lobo amparada por convenios y directivas internacionales”.
Recordaron que en mayo del pasado año se anuló la consideración del lobo como especie cinegética, al dejar sin validez los artículos 13 y 14, entre otros, del Decreto 32/2015, de 30 de abril, por el cual se regulaba la conservación de las especies cinegéticas de Castilla y León. Ahora, esta sentencia apunta que el lobo “no es especie cinegética, ni cazable, en Castilla y León”; que “no hay plan válido para la supuesta conservación y gestión del lobo”; y que “en lógica consecuencia, no pueden autorizarse cupos de caza al norte del Duero”.