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Las intérpretes que llegaron del frío

El centro de la memoria histórica rememora a las 100 traductoras que asistieron a los asesores y técnicos soviéticos que vinieron a ayudar a los republicanos en la guerra
Jesús Baigorri y María José Turrión, este martesn en el Centro Documental de la Memoria Histórica.

Con motivo del Día Internacional de la Mujer Trabajadora, el Centro Documental de la Memoria Histórica acogió este martes la conferencia ‘Las intérpretes que vinieron del frío. Rusas en la Guerra Civil española, 1936-1939’, que impartió el profesor Jesús Baigorri, experto en la historia de la traducción y la interpretación.

 

Con este acto, el Centro se suma un año más a la organización de un acto conmemorativo y de reivindicación de los derechos de las mujeres. La conferencia fue presentada por María José Turrión, subdirectora del Archivo General de la Guerra Civil Española y codirectora de los cursos Memoria de Mujer que el Centro Documental de la Memoria Histórica  organiza en colaboración con la Universidad de Salamanca desde el año 2009 y del que se han realizado ya seis ediciones.

Frecuente es la mención de las Brigadas Internacionales como una babel de lenguas.  Pero, en general, la historia convencional ha pasado por alto el estudio de las barreras lingüísticas con las que se toparon los miles y miles de personas que participaron en la Guerra Civil española sin conocer el idioma de la inmensa mayoría de los combatientes y de la población local.

Actividad

La conferencia de Jesús Baigorri puso de relieve el papel que desempeñaron estas intérpretes como eslabones necesarios en un conflicto de alcance internacional y en una época en la que eran imprevisibles el proceso de feminización experimentado después por la profesión y la constante sucesión de guerras en el mundo.

El apoyo de la Unión Soviética en recursos humanos al bando republicano consistió en el envío a España de dos mil asesores y especialistas, entre los que vinieron unos doscientos intérpretes, de los cuales más de la mitad fueron mujeres.

Sus funciones fueron las de traducir interrogatorios a presos, en hospitales, en tareas de espionaje y también la traducción literal de textos escritos pasándolos, asimismo a texto escrito en ruso.

Sus conocimientos del español eran asimétricos, desde las que lo dominaban hasta las que tenían lo justo para entenderlo y traducirlo al ruso.

Incialmente vinieron para estancias temporales y luego fueron relevadas bien por agotamiento o porque ya se sospechaba de que estuvieran contaminadas por elementos anarquistas o trotsquistas.

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