Agentes de la Policía Nacional salmantina han detenido a un individuo de 43 años por amenazar a los clientes de una gasolinera con una señal de tráfico que previamente había arrancado, y con la que también ocasionó daños en puertas de las dependencias de la estación de servicio. Luego, además, ofreció resistencia a los agentes que intervinieron en el lugar de los hechos.
Fue el empleado del negocio quien llamó a la Policía. A su llegada, observaron a un individuo sentado sobre una señal de tráfico de unos dos metros de altura, que había arrancado previamente del suelo, «dirigiéndose hacia ellos con los puños en alto en actitud amenazante», indica la Policía.
El trabajador contó a los agentes que se había presentado con la señal de tráfico, haciendo amago de romper la luna de la gasolinera para golpearle y que también cargó contra la puerta del baño, que presentaba numerosos golpes y la manilla fracturada. También constataron que había amenazado a algunos clientes, que tuvieron que abandonar el lugar para no ser agredidos.
Al ahora detenido lo acompañaba otro hombre quien dijo a los agentes que ambos eran marroquíes y se dirigían a Francia para trabajar, y que desconocía las causas de su actitud, ya que se encontraba «muy alterado y opuso permanentemente resistencia a la actuación policial y a su detención», según señala la Policía.